
Agentes municipales continúan con los trabajos de la construcción de 500 metros de pavimento articulado en el Pasaje Pujol. Operarios de la Secretaría de Infraestructura realizan la construcción de cordones cuneta, redes de cloaca y nuevas conexiones de agua potable entre México y Colombia detrás de la Iglesia Nuestra Señora de Pompeya. La urbanización de la zona fue un compromiso que el intendente Fabián Ríos asumió con los vecinos, quienes agradecieron su interés por dotar infraestructura a esa comunidad del norte de la Capital.
La Municipalidad de Corrientes avanza este viernes 4 de noviembre con el adoquinado de 500 metros sobre el Pasaje Pujol, en el barrio Nuestra Señora de la Pompeya. La obra se extenderá desde Estados Unidos hasta Santiago del Estero.
La Secretaría de Infraestructura confecciona mediante camiones mixer hormigoneros 1.000 metros de cordones cunetas de ambas bandas antes de colocar 500 metros lineales de arena-cemento sobre el pasaje donde serán puestos a mano y de forma artesanal los adoquines.
Actualmente se construyen tendidos cloacales y continúan con la confección de cordones cuneta, entre México y Colombia, en cercanía de la Iglesia, antes de colocar el pavimento articulado.
El trabajo es desarrollado por operarios comunales en conjunto con cooperativistas de “Argentina Trabaja”, quienes se encargan de la fabricación y colocación de los adoquines.
La gestión del intendente Fabián Ríos no solo trabajará en el pavimento articulado, sino también en la iluminación, señalética de la zona y colaborará con la construcción de veredas.
La obra forma parte de una rápida respuesta a la demanda de los vecinos, que generará una alternativa de circulación de forma paralela a la avenida Armenia, mejorando las condiciones del barrio Pompeya y revalorizando de esta manera las propiedades.
Previamente operarios municipales realizaron la apertura de caja y nivelación de la arteria, desde la esquina de Estados Unidos hasta México. Luego se compactó el suelo para disponer una capa de arena-cemento.
Los adoquines son fabricados en la maquinaria industrial que funciona en la fábrica municipal ubicada en el barrio Río Paraná. La misma tiene una capacidad para producir 1.700 bloques de hormigón por hora. La fábrica, a cargo del ingeniero Edgard Hamm, genera al Municipio capitalino autoabastecimiento de materiales para el desarrollo de más obras públicas y privadas.
Las ventajas del adoquinado son el mantenimiento económico, sumado a la facilidad en las reparaciones, mediante el levantamiento de las piezas sin provocar deterioros en los mismos. También es de fácil ejecución y de larga vida útil.
La acción es similar a las que la Municipalidad de Corrientes desarrolló con éxito y gran aprobación de los vecinos en los pasajes Bover, Ortíz y Mitre del barrio Sur; Revidatti y Sáenz en el barrio San Martín, el pasaje Anchorena en el barrio San Benito, Lafont en el Libertad y Skoll en La Rosada entre otros.