El Gobierno descartó por ahora tratar la ley laboral enviada al Senado y evalúa reformarla con varias normas sueltas, una de las ideas originales que había sido descartada por Jorge Triaca.
"No es de vida o muerte que sea una sola ley o varias leyes. O que no podemos aceptar es que no haya cambios en el sistema laboral injusto y obsoleto", planteó Marcos Peña, ayer, en la entrevista a radio Mitre.
"Van a haber modificaciones normativas que el Congreso definirá. Si el título de reforma laboral evoca otro momento en el que parece que pierden los trabajadores, bueno, volvamos a la mesa de trabajo para debatirlo", se bajó del ring Peña.
El Gobierno reculó tras la demostración de poder de Moyano y Barrionuevo en Mar del Plata. Macri privilegió la idea de Quintana de evitar debatir una reforma laboral y apelar a varias leyes sueltas.
Peña volvió a enfriar la reforma laboral horas después de la cumbre sindical en Mar del Plata, liderada por Hugo Moyano y Luis Barrionuevo, donde se le exigió dar ese paso, derogar la ley previsional y no poner topes de 15% a las paritarias.
Como relató LPO, los veteranos dirigentes no lograron reunir a todas las vertientes de la CGT, pero anticiparon que darán un plan de lucha dentro de la central obrera, con movilizaciones y amenazas de paro.
Uno de los ausentes fue Héctor Daer, de Sanidad, miembro del triunvirato de conducción de la CGT y referente de "Los Gordos", los legendarios gremios de servicios.
Esta mañana respaldó la fragmentación de la reforma. "Me parece bien, va a poder desagregar más los contenidos y debatirlos más profundamente. Me parece una buena medida que creo que se debería haber tomado de entrada", señaló.
Macri buscó un gesto para apaciguar la disputa con los díscolos y le permitió otro triunfo a Quintana, el más interesado en no tocar la ley de contratos de trabajo. Triaca sospecha que estuvo detrás de la difusión de sus audios insultando a su empleada doméstica, también designada funcionaria del Somu. Ayer, Peña aclaró que seguirá en el cargo.
La idea de dividir la reforma laboral había tenido eco en el Congreso, donde los referentes de Cambiemos hablan a diario con Quintana, ahora escoltado por el lilito Fernando Sánchez.
El plan que había a fin de año era tratar el capítulo de blanqueo de los trabajadores en negro y dejar la reforma de la ley de contratos de trabajo para otra ocasión.
"Vamos a pagar el costo igual y hacer todo por la mitad", sostuvo Triaca y Macri lo entendió igual.
