
Ayer a la tarde, en pleno microcentro capitalino, se produjo el choque de dos motocicletas que dejó a un par de personas heridas y que habría acontecido porque uno de los vehículos circulaba a una velocidad excesiva, lo cual fue claramente una imprudencia que pudo tener consecuencias más graves.
Uno de los protagonistas es un muchacho que se dirigía por calle Buenos Aires en una Zanella de baja cilindrada. El joven iba con dirección a su trabajo, un comercio ubicado en cercanías a costanera.
“Yo venía por Junín, él pasó a gran velocidad y me tocó la parte de atrás. Encima está allí tirado, se hace el lastimado si hace un rato antes de que venga la Policía levantó su moto y se acostó”, dijo la otra víctima lesionada,una muchacha que terminó con raspones y golpes en brazos y piernas. La muchacha iba junto a una amiga sobre una moto de 110 cilindradas de marca Brava, la cual tenía dañado el faro delantero. Luego de la caída, la mujer se sentó y quedó sin moverse en una esquina para intentar mitigar el dolor.
Sobre la calle Buenos Aires, pasando Junín, se pudo ver las marcas de las ruedas de la Zanella, que claramente perdió el control tras rozar al otro vehículo y se fue contra el cordón.
Ante el accidente, acudieron policías y agentes de tránsito. Se solicitó dos ambulancias para los heridos, las cuales tardaron unos minutos en llegar. Si bien el joven fue revisado por los médicos, prefirió no ser hospitalizado ya que debía asistir a su trabajo, según les dijo a los profesionales de la salud. Es así que tras arreglar los detalles del choque, que por fortuna no registró lesionados graves, el muchacho partió al comercio mencionado. La chica no podía moverse por sus propios medios, así que en una silla de ruedas se la subió a la ambulancia, con rumbo al hospital.