
En noviembre del 2013 se produjo el derrumbe de los balcones de un edificio en construcción ubicado sobre la calle Paraguay al 200 del barrio Aldana y, a cuatro años del hecho, los vecinos de las viviendas linderas aún esperan una solución a la puja judicial desatada a raíz de los graves desprendimientos.
La familia Cattaneo, que comparte la medianera con el edificio, fue la más damnificada por la construcción debido a que no sólo vieron su propiedad dañada, sino también debieron mudarse a otra vivienda a raíz de los graves problemas causados por la obra y ante la falta de soluciones definitivas a sus reclamos. Hasta el momento, no fueron subsanados los daños.