Por Daniel Caran
“En tiempos de cuaresma es oportuno lograr la conciliación y no una mayor división. Profundizo la grieta dentro del partido. El mostro hasta hoy que no quiere o no puede poner de pie al partido en Corrientes” fue el primer esbozo de protesta que esgrimió Daniel Caran como referente provincial de la línea interna “Volver a Creer”, que tuvo repercusión casi al unísono en el universo de afiliados que tiene el Partido Justicialista en el Distrito Corrientes, cuyos integrantes entre sorprendidos e indignados, sintieron el sabor amargo de estar en presencia de ante el zarpazo que lanzó a hurtadillas el delegado normalizador, Julio René Sotelo, al confeccionar una lista de 23 congresales para el primer gran encuentro del año del peronismo nacional, que se hará este jueves en el estadio de Ferro Carril Oeste en Caballito (Bs. As).
“Nadie deslegitima ni desmerece a los veintitrés compañeros de esta lista que llevarán la voz de los correntinos al congreso de Buenos Aires”, se escuchó de Daniel Caran, hablar de consenso “es una situación mentirosa, porque lo único que se conseguirá así es un consenso de unos pocos y no del conjunto”.
“Nosotros no trabajamos para la derrota, debemos trabajar para que no nos griten nunca más PERDIERON PERDIERON y PERDIERON”,reflexionó el joven dirigente mercedeño en diferentes medios radiales de la Capital y el interior de la provincia como el caso Mercedes, Esquina, Saladas, Goya, entre otros, añadiendo “Sotelo tuvo una actitud sectaria, negacionista, discriminatoria y excluyente. El debe poner en modo normal lo anormal. Profundizo la anormalidad institucional y partidaria que vive nuestro movimiento”
“Sus actos, como el de todos, deben ser a la luz del día, mas aun la de el que tiene mandato de la Justicia Federal Electoral y sorprendernos así, sin aviso, de esta decisión por lo pronto es sospechoso. Quiero creer que no lo apretaron. Sería muy grave. Él no dice la verdad. No convocó a todos. No ponemos en discusión los nombres elegidos sino el modo, la forma intempestiva e inconsulta, entre gallos y medianoche, detrás de bambalinas”.
“Sotelo sabe que de mí sólo encontrará respeto, ayuda y apoyo, pero así, no creo que siga teniendo más nuestra confianza.
Tuve una larga conversación solo por WhatsApp con él, pero no tiene muchas respuestas claras y convincentes.
Ojalá nos equivoquemos, pero así no creo. Las mismas metodologías, actitudes pocos transparentes, no nos llevarán a buen camino.
Que no haga lo de PEDRO: negar, negar a quienes existen en lo partidario y también en lo electoral”.
Aquellas líneas que se sienten desconcertadas con la actitud del normalizador, continúan esperando explicaciones. Teniendo en cuenta que el propio Sotelo parece haber acordado en un café o en el banco de una plaza, con tres o cuatro interesados, digitando un muy mal ejemplo, que flaco favor le hace al peronismo provincial, es la lupa de Daniel Caran sobre este urticante tema que levantó polvareda entre los afiliados justicialistas.
Está claro que después de este sello y rúbrica de Sotelo –un hombre del peronismo chaqueño - la bendecida cooperativa y la Cámpora recobraron vigor. No importa que haya sido la gota que rebalsó el vaso de la contradicción. “El interventor ingresó de nuevo a una discordancia. Tenía la misión de normalizar lo que estaba anormal. Pero con esta decisión termina convalidando a quienes llevaron a una situación anormal al Partido Justicialista de Corrientes”, dijo el referente de Volver a Creer.
“No se discute a los 23 compañeros, sino los criterios que utilizó el normalizador para designarlos. En qué momento, cómo, cuándo, dónde, con quiénes”, cerró el dirigente Daniel Caran.
