Pipas de girasol, un chute de magnesio, fibra, proteínas y grasas saludables
Entre los alimentos ricos en magnesio están frutos secos como las almendras (250 miligramos de magnesio por cada 100 gramos), las avellanas y pistachos (ambos con 150 mg/100g), legumbres como los cacahuetes, los garbanzos, judías blancas y guisantes, el maíz (con 120 mg/100g), el chocolate negro (100mg/100g) y el pan integral (91mg/100g).
Ahora bien, superando a todos ellos en lo que a cantidad de magnesio se refiere están las pipas de girasol, que alcanzan los 364 mg de este mineral en 100 gramos. Eso sí, recuerda que la ración diaria recomendada rondaría los 30 gramos (y por lo tanto te estaría aportando entre 95-105 mg de magnesio, aproximadamente un 25% de la ingesta diaria recomendada para un adulto que se sitúa entre los 310 y 420 mg al día. No hay que olvidar que se trata de un alimento muy calórico (600kcal por cada 100 gramos) y no deberías excederte. Una buena idea es, por ejemplo, añadirlas en crudo a tus ensaladas favoritas.
Pero además de este aporte de magnesio, las pipas de girasol, también ricas en fibra, proteínas, vitamina E y minerales como el selenio, el calcio, el fósforo y el zinc, tienen otras muchas propiedades que benefician a nuestra salud. Además de un potente efecto antioxidante, protegen nuestra salud cardiovascular (ya que son ricas en ácidos grasos insaturados, como el ácido linoleico, que ayudan a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre) e inmunológica, favorecen el buen funcionamiento del sistema digestivo y tienen poder saciante.
Son también aliadas de nuestros huesos y músculos, pueden ayudar a controlar la glucosa en sangre, y a mejorar el ánimo, reducir la ansiedad y dormir bien ya que son activadoras de la serotonina, un neurotransmisor y hormona imprescindible para nuestro bienestar.
Fuente:https://www.telva.com/bienestar/nutricion/2025/05/04/6810ce2701a2f1845a8b458b.html
