El cocinero español nacionalizado estadounidense viajó a la frontera con Polonia para colocarse al frente de la asistencia alimentaria a las víctimas de la invasión rusa. Fue discípulo de Ferrán Adriá, recibió cuatro estrellas Michelin y una nominación al Premio Nobel de la Paz.
José Andrés, uno de los cocineros más galardonados del mundo y que supo estar al frente de aclamados restaurantes, es conocido también por su faceta humanitaria: con World Central Kitchen (WCK), la ONG que dirige desde 2010, viajó a Ucrania para alimentar a los refugiados de ese país tras la invasión de Rusia.
El chef español nacionalizado estadounidense llegó a la frontera con Polonia el 27 de febrero para organizar un plan de asistencia. Su organización ya sirvió más de 8000 comidas calientes en el puesto fronterizo de Medyka, y otras tantas en Rumania.
José Andrés: 40 toneladas de ayuda humanitaria y el cuerpo en la zona de conflicto
“Me encuentro con tantos refugiados, familias que están escapando y no saben qué sigue. Haremos todo lo posible para no decepcionarlos”, señaló Andrés en un video grabado desde la plaza Rzeszów y publicado en su cuenta de Twitter.
Andrés le pidió a Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, que le permita entrar y salir del territorio nacional para poder alimentar a los miles de desplazados por la invasión rusa. Si World Central Kitchen recibe el permiso, “podremos alimentar a los miles de hombres y mujeres que están esperando para estar a salvo”, indicó el chef, y agregó: “Sabemos que tiene cosas más importantes que hacer, pero esto también es importante, señor”.
En las próximas horas, la ONG de Andrés recibirá en Rzeszów -a 90 kilómetros de la frontera con Ucrania- más de 40 toneladas de ayuda humanitaria, incluyendo fogones, equipos isotérmicos para mantener la comida caliente, paelleras de tamaño industrial, fiambreras y otros materiales de cocina que los voluntarios utilizarán para preparar las comidas.
“¿Por qué ponemos a hombres y mujeres en esta situación? ¿No aprendemos de los errores del pasado?”, se preguntó Andrés, visiblemente compungido, al tiempo que calificó a Vladimir Putin de “matón”, pidió que no haya “otros como él” en el mundo, y lamentó que “siempre son los pobres quienes pagan las consecuencias”.
José Andrés, exponente de la alta cocina que se destaca por sus labores humanitarias
José Andrés, de 52 años, es uno de los cocineros de mayor renombre en el mundo. Supo ser discípulo de Ferrán Adriá en El Bulli (varias veces elegido como el mejor restaurante del planeta), fue galardonado con cuatro estrellas de la Guía Michelin -entre otros premios- y lleva una trayectoria de más de 20 años en los Estados Unidos.
A la par de sus logros en el arte culinario, Andrés forjó a través de World Central Kitchen una labor humanitaria que le valió ser nominado al Premio Nobel de la Paz y ser incluido durante siete años consecutivos -entre 2012 y 2018- en el ranking de “las 100 personas más influyentes del mundo”, elaborado por la revista “Time”.
WCK nació hace 12 años para responder a la escasez de alimentos en Haití provocada por el terremoto que devastó a la isla ese año. Su método de brindar ayuda humanitaria se basa inicialmente en atacar la necesidad más urgente, y luego impulsar junto a chefs locales distintas campañas para ofrecer una solución al problema del hambre.
Andrés lideró la ayuda alimentaria en Puerto Rico tras el desastre ocasionado por el huracán María, en 2017. Recientemente, durante la pandemia, su organización sirvió más de tres millones de comidas en España y más de 30 millones en los Estados Unidos.
“Es increíble ver el apoyo que tenemos aquí en la frontera con Ucrania”, dijo el cocinero, que se encontraba en un festival gastronómico en Miami cuando se enteró de la invasión rusa a Ucrania.
“Es duro pensar que ahora mismo hay muchas mujeres -porque los hombres están combatiendo- con sus hijos andando durante horas para salir de Ucrania y estar a salvo en diferentes países”, acotó Andrés, y remarcó que “con las botas sobre el terreno aprenderemos más sobre qué y cómo podremos ayudar”.
