Como muchos votantes de Juntos por el Cambio, Pablo Rossi tenía atragantadas las críticas, burlas y cuestionamientos que le llovían desde el universo libertario.
Con el resultado consumado en la Cámara de Diputados, el conductor de A24 se desquitó y les pasó factura.
Así le enrostró al gobierno el haber humillado al PRO en la Ciudad y el haberse subido a un pedestal en el comienzo de la gestión sin tener en cuenta que esos mismos que se desprecian van a estar esperándolo cuando llegue la mala cosecha.