
Fue luego de un operativo policial llevado a cabo en un negocio de celulares. Por el caso detuvieron a una mujer y a un hombre.
Por el sustrajo de un celular de alta gama ocurrido en Chaco, y luego de un rastreo llevó a que efectivos de la Policía realicen dos allanamientos en distintos domicilios. Uno de ellos se produjo en un departamento ubicado en la parte céntrica de Corrientes, en donde detuvieron a una mujer quien sería la responsable del robo del teléfono.
El otro procedimiento se llevó a cabo en un local de reparaciones de celulares, sito por calle Irigoyen y Brasil. Allí, los uniformados secuestraron el móvil denunciado como sustraído y 300 celulares de diferentes marcas y modelos, 30 tablets de diferentes marcas y modelos, computadoras, discos regidos y equipos electrónicos para desbloquear celulares.
En negocio allanado funcionaba la cueva donde se recibían los celulares robados y se los desbloqueaba para devolverlos al mercado ilegal. Esto originó una investigación aparte para determinar el origen de los celulares recuperados.
El dueño del comercio quedó detenido en Corrientes. En tanto, a la mujer la trasladaron al Chaco a enfrentar la Justicia de la vecina provincia, indicaron fuentes oficiales.