La Policía había recibido varias denuncias los días previos, así como el mismo día del procedimiento. Las estructuras incautadas quedaron en la dependencia policial y se abrieron causas penales para los organizadores.
En la localidad de Caá Catí se repitió la historia de siempre. Un organizador y decenas de personas protagonistas de un pseudo torneo local jugaban al fútbol en plena pandemia y de forma ilegal. Y como sucedió en otras oportunidades en distintas ciudades, vino la Policía harta de advertirles que no lo hagan y les retiró los arcos.
La inconsciencia, pero ahora con un condimento preocupante como es el crecimiento de casos de COVID -19, ahora en el interior, los desacatados de siempre, de los que abundan en todos lados, organizaron un “torneito” de fútbol en una cancha a las afueras de la localidad de Caá Catí. Y como era de esperarse, la concurrencia superó las expectativas de los organizadores y no pudo pasar desapercibido para la Policía local, que tras recibir varias alertas telefónicas sobre el evento, los intimó a que desistan de continuar.
Pero el hartazgo llegó su punto límite y los efectivos fueron hasta el lugar y, pala en mano, retiraron los arcos hechos de postes de madera y caña, lo que generó estampida y fuga por parte de muchos de los infractores, que prefirieron ponerle fin al “fulbito”, antes de pasar la noche dentro del calabozo.
Aún sabiendo de que la acción de retirar los arcos del potrero, no va a evitar que vuelvan a intentar juntarse para jugar al fútbol, desde la Policía indicaron que “al menos el mensaje es claro. No vamos a permitir que se siga infringiendo la ley y poner en peligro a todos”.
Según los testigos y la propia Policía, el evento deportivo, pero ilegal, habría convocado a unas 100 personas entre jugadores y algunos curiosos que acompañaban.
Por día la Policía de Corrientes recibe al menos medio centenar de denuncias telefónicas, no solo en capital, sino también en el interior de la provincia, de desaprensivos que se reúnen a jugar al fútbol.
Antecedente
Pero este caso no es nuevo, ya que tiene su antecedente reciente en la capital correntina donde la Policía, también con cierto hartazgo de tener que ir varias veces en un mismo día, decidió ingresar por la fuerza a un barrio costero de la capital correntina y hacerse de los arcos metálicos de la canchita donde se disputaba un torneo, en el que las apuestas por dinero, estaban a la orden del día.
El 27 de junio, tras varias fallidas incursiones y la violenta respuesta a piedrazos a las patrullas, tomaron por sorpresa a los “deportistas”, por varios flancos, poniendo fin a la partida, aunque el señalado como organizador de los mismos fue detenido y denunciado penalmente.
Con el objetivo en custodia, varios de los uniformados comenzaron a retirar los arcos, los cargaron en las camionetas y se los llevaron a la comisaría Segunda.
