Un grupo de oficiales sorprendió a los vecinos de una cuadra en pleno centro, cuando irrumpieron en el lugar. Trascendió que investigaban un robo.
Hace minutos finalizó un sorpresivo operativo de seguridad en un departamento ubicado sobre la calle 9 de Julio al 1.700 de la Capital.
Un grupo de oficiales de la Policía irrumpió en el lugar con una orden de allanamiento y trascendió que estaban tras los rastros de un IPhone robado cuya última señal habría sido emitida desde ese domicilio.
El sitio funcionaria como un local de venta y reparación de celulares, pero el técnico negó tener cualquier relación con el aparato robado.
De todas formas, secuestraron varios elementos.
