
Un grupo de padres estaba cocinando una paella para recolectar fondos para uno de los cursos del Instituto Pío XI, hace dos domingos. El lamentable hecho sucedió cuando estaban sacando el recipiente del fuego, uno de los padres identificado como Héctor Dorado, perdió el equilibrio y cayó en la preparación hirviente, resultando con el 47 por ciento del cuerpo quemado. Ahora sus amigos venden un bono contribución para ayudar a la familia.