En la Copa Rusia se vivió una situación totalmente bizarra. El Zenit le ganaba 2-1 al Ajmat por la fecha 4 del Grupo A. Nader Ghandri había logrado el descuento, pero sobre el final del partido, terminaría siendo expulsado por una supuesta jugada peligrosa.
El zaguero se retiró con bronca de la cancha y le regaló su camiseta a un hincha que se la pidió desde la tribuna, pero unos minutos después, el mismo fanático se la tuvo que devolver ya que el VAR revisó la acción y consideró que Ghandri estaba mal expulsado, por lo que el árbitro le anuló la roja.
Es así que tuvieron que llamar al tunecino para que volviera del vestuario y le tuvo que pedir al hincha que le devolviera la casaca para poder seguir jugando.
Con buena predisposición, el fanático le devolvió su camiseta y, entre risas, Ghandri se reincorporó al juego aunque no terminaría cambiando la historia: el Zenit defendió la ventaja y terminó imponiéndose 2-1.