Alberto Fernández está para el cachetazo, ya parece una moda burlarse de él y aprovecharse de su pésima imagen para hacer leña del árbol caído.
Esta vez le tocó el turno a la ignota Rosemary Maturana, quien tiene sus cinco minutos de fama porque surgieron versiones de que su relación con Javier Milei es lo que habría precipitado la ruptura con Yuyito González.
La asesora de imagen, que trabajó con el Presidente en la campaña electoral y con el que sigue teniendo una buena relación personal, charló con Baby Etchecopar y sacó a relucir una historia impensada.
Sin que nadie se lo pidiera, contó que tuvo un encuentro íntimo con Alberto Fernández, pero no lo dejó muy bien parado.
