Las manchas amarillentas en las axilas no sólo son estéticamente desagradables, sino que pueden afectar nuestra confianza y seguridad al vestir diversas prendas. Las causas más comunes son la acumulación del sudor, uso excesivo del desodorante, fricción constante con la ropa e incluso cambios hormonales.
Afortunadamente, existen varios métodos naturales y sencillos que podemos usar tanto en la ropa como en nuestra piel y ayudan a eliminar eficazmente estas molestias.
Exfoliación regular: La exfoliación es clave para remover células muertas e impurezas. Se recomienda utilizar un suave exfoliante casero en nuestra piel (hecho con ingredientes como azúcar moreno o café molido mezclado con aceite de coco).
Jugo natural de limón: El limón es conocido por sus propiedades blanqueadoras naturales debido a su alto contenido ácido cítrico. Aplica jugo fresco directamente sobre la zona afectada antes del lavado diario durante dos semanas y notarás una considerable reducción en las manchas oscuras.
Leche espesa+cúrcuma: Este dúo realmente funciona, necesitarás 2 cucharadas grandes de leche entera y unos 4 gramos aproximadamente de cúrcuma; mezcla ambas sustancias y con ayuda de un pincel colocá sobre tu ropa afectada. 15 minutos después lava normalmente. Es importante no usarla si no vamos a lavar ese día, ya que al día siguiente tendrá manchas.
Aloe vera: Además del agradable efecto refrescante, el gel natural de la planta contiene propiedades antibacterianas y antioxidantes que ayudan a reducir las manchas en las axilas. Aplica directamente sobre la zona y deja actuar durante 20 minutos antes de retirar con agua tibia.
Es importante destacar que estos remedios caseros pueden tardar semanas o incluso meses antes de mostrar resultados significativos, por lo cual se recomienda ser constante en su aplicación. Si bien existen opciones más agresivas como tratamientos químicos o láser, siempre recomendamos probar primero los métodos naturales debido a sus bajos costos económicos e inexistencia casi absoluta ?de algún tipo efecto secundario.
Lo mejor será acudir regularmente al dermatólogo quien nos dará indicaciones específicas respecto este tema tan delicado.
Para evitar futuras manchas indeseadas en nuestras axilas, es primordial utilizar desodorantes sin alcohol ni fragancias fuertes que puedan irritar nuestra piel sensible.
Llevar una vida sana, mantener la zona bien hidratada y realizar regularmente estos cuidados básicos nos ayudará a gozar de unas axilas perfectamente limpias y libre de manchas.
