Cuando los recién casados estarán ya disfrutando de su luna de miel cuyo destino es Maldivas y Bután, los invitados a la boda de Almeida y Teresa Urquijo todavía viven la resaca emocional de un enlace del que todo el mundo habla.
Los reyes eméritos con sus hijas, sus nietos Victoria Federica, Felipe Froilán y Juan Urdangarin, empresarios, aristócratas y amigos de los novios, fueron algunos de los 500 invitados que disfrutaron de la celebración en la finca de la abuela materna de Teresa Urquijo en Colmenar Viejo.