El merendero Sembrando Sueños del barrio Río Paraná inició una campaña solidaria para juntar elementos para las decenas de niños y niñas que acuden de manera periódica al lugar.
La idea es recolectar alimentos y también abrigos, teniendo en cuenta que ya comenzaron los días frescos y se espera que la temperatura siga bajando conforme se acerque el invierno.
Por eso, la asociación civil que tiene a su cargo el lugar hizo un llamado a toda la sociedad para que puedan colaborar con esta causa y poder así asistir a familias en estado de vulnerabilidad, especialmente a los más pequeños.
Con el lema "Ayudemos a ayudar", el merendero solicita la donación de remeras, buzos, camperas, camperones, medias, zapatillas, acolchados, mantas, bufandas, gorros, guantes y pantalones, y otras prendas que puedan resultar de utilidad. Aclararon que deben ser ropas en buen estado y que aceptan todos los talles, ya que los destinatarios son chicos de variada edad y contextura física.
Además, son bienvenidos también alimentos que puedan servir para darles la ración de comida a los niños del barrio y alrededores.
Los interesados en ayudar y formar parte de esta noble causa deben comunicarse a través de WhatsApp a los números 379 4939777 y 379 4631133.
También podrán contactarse a través de las redes sociales, buscando el perfil de la asociación como Sembrando Sueños Río Paraná, que asiste especialmente a niñas y niños que viven en la zona de La Tosquera, cercana al río.
Allí, además de dar la merienda, trata de ayudar también en otras cuestiones y atender casos particulares. Incluso, incursiona también en el apoyo escolar para tratar de acompañar a los pequeños en su etapa estudiantil.
Aunque la institución recibe habitualmente donaciones de empresas y de organizaciones sociales, muchos de los costos son cubiertos por los propios voluntarios que se dedican a preparar la merienda.
Entre sus logros más importantes de los últimos tiempos resaltan el haber podido construir una sede, ya que contaban solo con terreno. Desde los cimientos hasta el techo fueron también obra de la solidaridad y la ayuda, incluso de las mismas familias a las que ellos asisten diariamente en el barrio.
