Según informaron funcionarios de seguridad local, un coche bomba y un artefacto explotaron en Samawa, a unos 300 kilómetros al sur de la capital Bagdad.
El presidente del comité de seguridad local, Ahmed Manfi, informó a la agencia de noticias DPA que la primera cifra de víctimas podría aumentar ya que varios de los heridos están graves.
El nuevo atentado, que se produce en un clima de escalada de violencia permanente, sucede un día después del perpetrado por la organización yihadista Estado Islámico (EI) en las afueras de Bagdad y con nutridas manifestaciones frente al Parlamento exigiendo un gobierno de tecnócratas.
El atentado de la víspera tuvo lugar en un mercado popular para la venta de ganado en una zona de Al Nahrauan situada en las afueras de Bagdad y también de mayoría también chiíta, provocando al menos 29 muertos y 39 heridos.
Entre los muertos figura un grupo de peregrinos que se dirigía al mausoleo chiíta del imán Musa al Kazem, por el aniversario de su muerte.
El ataque se produjo pese al refuerzo de las medidas de seguridad por parte de las fuerzas iraquíes, que cortaron varios caminos y puentes hacia la zona de Al Kazemiya, explicó una autoridad de seguridad a la agencia de noticias EFE.
Los chiítas y sus templos son -con frecuencia- objeto de ataques de Estado Islámico (EI), que proclamó en junio de 2014 un califato en las zonas de Irak y Siria bajo su control.
El pasado febrero, al menos 55 personas murieron y otras 116 resultaron heridas en un doble atentado suicida perpetrado en el distrito capitalino de Ciudad al Sadr, de mayoría chiíta, cuya autoría fue asumida por el EI.
Este nuevo ataque se produce en un momento político complicado en Irak, donde el primer ministro, Haidar al Abadi, ha estado tratando de formar un gobierno con tecnócratas, pero que aún no fue aprobado por el Parlamento que continúa paralizado.
De hecho, anoche manifestantes chiítas ocuparon el Parlamento exigiendo la conformación del un "gobierno de tecnócratas y luego realizaron.
Pocas horas después el hemiciclo fue abandonado por los manifestantes, quienes iniciaron un acampe en la plaza Al Ihtifalat (Celebraciones), situada en la fortificada Zona Verde de Bagdad".
Esta mañana, ese acampe se transformó en masivo con la llegada de más manifestantes que que entonaban lemas como "pacífica, pacífica" y "revolución blanca".
