Dos dotaciones de bomberos trabajaron por más de 5 horas para sofocar un incendio, que terminó consumiendo más de 40 hectáreas. Lograron salvar las casas.
No iniciar quemas sin autorización. La premisa está presente y es reiterada en innumerables ocasiones por las autoridades de Defensa Civil y cada uno de los cuerpos de bomberos voluntarios de la provincia.
Sin embargo, las contingencias ocurren y ayer un foco de incendio -que aún no lograron determinar cómo se inició- mantuvo en vilo durante toda la jornada a dos dotaciones de bomberos de Saladas.
"El incendio se produjo en la zona de acceso a Pago de los Deseos, en un predio privado donde se acumulaban desechos de una explotación de eucaliptos. Como saldo del incendio se quemó un tractor y una rastra, que se quedaron varados y no dio tiempo a sacarlos.
"Todavía se trata de determinar cómo se inició el fuego: si fue en la banquina de la ruta N° 13 y luego llegó hasta el lugar donde se acumulaban residuos de una explotación de eucaliptos, o bien si se inició en el mismo lugar. Lo cierto es que cuando llegamos ya había avanzado el fuego sobre un bañado y sobre la banquina", describió el oficial del cuartel 247, que está integrado por unas 40 personas en el cuerpo activo y que ayer debió dedicar dos dotaciones para sofocar el incendio.
Finalmente, "se quemaron unas 40 hectáreas. Un barrio entero de viviendas estuvo amenazado y se trabajaron entre 5 horas y media y 6. Afortunadamente, el viento cambió y ayudó a que el fuego se orientara hacia la zona de un bañado", explicó Ramos.
Mientras tanto, personal de la policía se apostó sobre la ruta provincial para "ayudar a que los vehículos redujeran la velocidad en la zona, ya que el humo que se produce al quemarse pastizales se extendió por varios kilómetros, complicando la visibilidad", dijo, a la vez que destacó la importancia de contar siempre con los permisos necesarios para el control del fuego cuando se pretendan iniciar quemas controladas.
Inscripción de voluntarios
Durante todo julio, los bomberos de Saladas abrieron las inscripciones para incorporar voluntarios a su cuerpo activo.
Unos 20 jóvenes de entre 18 y 40 años ya manifestaron su intención de sumarse a la tarea.
"Todo lo que pasamos durante el verano no hizo más que motivar a estas personas a querer integrarse como voluntarios. Hay que recordar que la tarea no es solo la de apagar incendios; hay todo un trabajo de logística, de mantenimiento de los vehículos y los equipos, que requiere tiempo y dedicación. Muchas veces son nuestros familiares los que hacen ese trabajo, que es muy importante para que podamos funcionar. Incorporar voluntarios siempre es una gran alegría", destacó Ramos.
Ayer, al finalizar la tarde, luego de haber pasado la jornada de trabajo sofocando el incendio en Pago de los Deseos, el oficial todavía seguía disponible en el cuartel, descargando imágenes e información recolectada con un dron; un material valioso que permitirá luego contar con información estratégica para hacer frente a otras contingencias.
