
El proyecto es ejecutado a través de un estudio que realizan los investigadores del Centro de Ecología Aplicada del Litoral, que cuenta con un enfoque sustentable, que permitiría minimizar la presencia de insectos que afectan al cultivo y disminuir el uso de agroquímicos.
Frente al avance de plagas en los cultivos arroceros, un grupo de investigadores del Centro de Ecología Aplicada del Litoral (Cecoal), con el apoyo del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y la Universidad Nacional de Nordeste (Unne), trabaja en un estudio a fin de aplicar estrategias de manejo integrado contra los insectos.
Se trata de un proyecto impulsado para conocer los principios ecológicos que rigen la producción de arroz, como base científica para poder comprender las dinámicas poblacionales de las especies de plaga y así encontrar alternativas que minimicen su presencia, como así también disminuir el uso de agroquímicos.
El estudio, que está en curso desde hace unos años, está a cargo de la licenciada Daniela Fuentes-Rodríguez, la licenciada Paula Gervazoni y la doctora Celeste Franceschini, del Laboratorio de Herbivoría y Control Biológico del Cecoal. En tanto que es financiado por el Conicet, por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica y por la Unne.
La investigación cuenta con la participación y colaboración de investigadores de otras instituciones científicas del país, e incluso este año se formó un grupo de investigación en arroz en la Unne para poder coordinar, ser más eficientes y dar una respuesta más integrada a los requerimientos del sector.
"Buscamos aportar un cambio de enfoque en el abordaje de plagas de cultivos, mediante la integración de herramientas basadas en la investigación y conocimiento del sistema ecológico y productivo que puedan ser aplicables por el sector productivo", explicó la licenciada Fuentes-Rodríguez.
Detalló además que "en esta primera etapa, se pone énfasis en la Chinche del tallo (Tibraca limbativentris), una especie de plaga que produce grandes pérdidas económicas al sector arrocero y que presenta gran dificultad para su control en el cultivo de arroz irrigado; y aclaró que "se estudiaron las poblaciones de este insecto en distintas arroceras de Corrientes durante el invierno, logrando detectar varias especies de plantas nativas que le sirven como refugio".
Finalmente señaló que también se detectaron procesos naturales que ocurren en estas plantas, que contribuirían a controlar de manera natural a las plagas.