
Las obras de construcción y equipamiento de la estación transformadora Oeste de la ciudad de Goya se encuentran interrumpidas por motivos económicos. A pesar de que avanza la última parte de su construcción en cuanto al área civil, el equipamiento se detuvo y el personal de la empresa encargada de las tareas reclamó ante los responsables con respecto a su continuidad laboral y a sus pagos. La alta demanda por las altas temperaturas es el marco menos promisorio para esta situación.
Al respecto, el integrante de la Asociación de Comercio de Goya, Aldo Ferezín, explicó: “Los trabajos en la futura estación transformadora Oeste, en la curva del camino al Cementerio, se encuentran paralizados. Es como construir una casa que está terminada, pero faltan los splits”, comparó.
“La obra tiene dos etapas. Una está en la parte final y prácticamente está terminada la parte civil. Pero la otra parte que le corresponde a la empresa Electroingeniería, hace veinte días que está detenida. Primero paró la obra porque como no tenía la segunda etapa con el proyecto aprobado, no podía continuar.
Entonces se generó un conflicto con el personal y ahora creo que se está llegando a un acuerdo. Esta etapa es la del montaje final, la parte final de la obra. Hace dos meses y medio se licitó la obra y ganaron cuatro empresas, que están trabajando en la compra de transformadores, seccionadores, disyuntores. El transformador está comprado y está lista la plataforma para bajarlo.
El equipo está a punto de viajar hasta Goya. En cuanto al montaje, hablamos de 49 millones de pesos necesarios y se suscitó el problema de quién instalaba toda esta aparatología, que es un trabajo electromecánico.
BUSCAN SOLUCIÓN
La semana pasada estuvieron reunidos el secretario de Energía de la Provincia, Eduardo Melano, con el ministro de Energía, Juan José Aranguren, en Buenos Aires. Ambos acordaron que el montaje lo continuará haciendo la empresa Electroingeniería y la mano de obra la pagará la Nación. Sobre esta base, la empresa retomará las actividades el 10 de enero de 2018, según Ferezín.