
El obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecin, concedió el ministerio del lectorado al seminarista Matias Escalante. La misa se llevó a cabo en el Santuario de Santa Lucia de los Astos, el jueves 17 de octubre, la cual aprovechó la ocasión para iniciar formalmente la gran Misión Diocesana. El flamante lector realiza su formación en camino al sacerdocio en el Seminario Interdiocesano La Encarnación de Resistencia, Chaco.
Junto a monseñor Adolfo Canecin, concelebró la misa el rector del Seminario presbítero Ruben Taibo, el vicario general de la diócesis presbítero Juan Carlos Lopez, el rector del santuario presbítero Adolfo Gutierrez y los formadores del seminario La Encarnación presbíteros Marcelo Araujo y Jorge Pellizardi. Asistieron, además de familiares seminaristas y amigos del flamante lector, los presbíteros Pablo Stortti y Daniel Alarcon Sotelo.
Después de la proclamación del Evangelio, el obispo pronuncio la homilía y previamente el presbítero Adolfo Gutierrez llamo al candidato diciendo “acérquese el que va ser instituido en el ministerio de lector” obtenido la repuesta “presente” de Matias Escalante.
HOMILIA
El obispo en su homilía destaco cinco verbos que servirán al lector para “vivirlas” en este ministerio, aconsejando: “recibir, meditar, asimilar, anunciar y glorificar” la Palabra de Dios.
Destaco el obispo que Dios “confió” a su Iglesia el ministerio de “predicar el Evangelio a todos los hombres”.
Mas adelante recordó que los lectores que cumplen un oficio que “esta al servicio de la fe que se nutre de la Palabra de Dios”.
“Proclamaras la Palabra de Dios en la asamblea litúrgica, educara en la fe y para la digna recepción de los sacramentos, anunciando la Buena Noticia de la salvación a los hombres que todavía la desconocen” dijo el obispo al seminarista oriundo de Mercedes, Corrientes.
Remarco “recibí la Palabra de Dios, meditarla todos los días, para crecer en un suave y vivo amor hacia ella. Que la conducta tuya manifieste a nuestro Salvador Jesucristo”.
En oración pidió por el seminarista para que realice con “empeño” el oficio que se les confio y que “anunciando a Cristo, glorifique al Padre que esta en los cielos”.
Después de un momento de oración, el Obispo Adolfo Canecin, entrego a Matias Escalante el libro de las Sagradas Escrituras, alentándolo a “transmitir con fidelidad la Palabra de Dios, para que tenga mayor vigencia en el corazón de los hombres”.