En una rápida jugada el actual Ejecutivo municipal, con dos tercios en el Concejo Deliberante, nombró al viceintendente y a una mujer con relación de parentesco con el actual secretario de Hacienda municipal, para que sean parte del organismo contralor de las cuentas municipales.
Casi un mes antes de la culminación de mandato de las actuales autoridades municipales en la segunda ciudad de la provincia, a través del Concejo Deliberante, se nombró a dos funcionarios –uno hasta ayer en funciones- para que formen parte del organismo contralor de las cuentas comunales de Goya.
El viceintendente y una mujer que tiene relación de parentesco directo con el actual secretario de Hacienda municipal, desde ayer son miembros del ente que debe controlar y aprobar o no, cómo el Poder Ejecutivo municipal goyano gastó los recursos públicos.
Es decir. En el caso del viceintendente se controlará así mismo, porque hasta ayer estaba en funciones. Y en el caso de la flamante nombrada -tiene un hijo junto al Secretario de Haciena- con quien deberá controlar en las rendiciones de gasto.
Junto al ex viceintendente chequearán la documentación de gastos y rendición de cuentas que se ejecutaron en al menos los últimos dos años.
En el caso del vicejefe comunal de Goya renunció al cargo en la tarde noche de ayer, eso fue lo que se conoció extraoficialmente.
Desde la oposición, los ediles del PJ esgrimieron que al tener los dos tercios el oficialismo liderado por la UCR, nada pueden hacer.
De fondo, queda evidenciada la considerable merma en calidad institucional en Goya y en la provincia. Y la pregunta es: ¿Por qué el actual Ejecutivo comunal nombra a sus propios funcionarios para controlar sus rendiciones de cuenta?
Todo, a un mes de concluir la gestión y asumir un nuevo jefe comunal electo en las pasadas elecciones del 29 de agosto último.
