En el Barrio San Antonio Oeste de la capital provincial la cartera provincial muestra gestión con insumos de limpieza y barbijos, donados por una firma privada. Todo bajo el rimbombante nombre del programa: “Fortalecimiento en los barrios”. La entrega se hace sin protocolos sanitarios y aglomeración de niños.
Las imágenes parecen extraídas de algún país tercermundista jaqueado por la hambruna y pobreza extrema. Niños y adultos aglutinados para recibir lavandina a granel o suelta –no entregan en envases cerrados- familias enteras reciben insumos de limpieza como lavandina y barbijos que fueron donados por una empresa privada.
Esos elementos son usados por el ministerio de Desarrollo Social de la provincia para exhibir gestión en uno de los sectores de la capital provincial más golpeados por la pobreza extrema. A unos 20 minutos del centro correntino.
Incluso las fotos oficiales enviadas por el ministerio dejan al desnudo lo endeble del relato exitoso del Gobierno provincial a través de los medios de comunicación. La realidad exhibida por la propia cartera encargada de modificar los elevadísimos índices de pobreza en la provincia, derriba el relato oficial de exitosa gestión en Corrientes.
