Algunos supermercados ya cuentan con la nueva mercadería tradicional de fin de año. Estiman que el incremento es de poco más del 30%. Hay variedad de segundas y terceras marcas, aunque ninguna a un costo menor de $110.
A dos meses de las fiestas de fin de año empiezan a aparecer tímidamente los productos típicos, aunque con un precio llamativamente mayor al año pasado.
Las góndolas de uno de los supermercados capitalinos, tiene un sector sólo para exhibición de pan dulce y budín, con valores entre 109 a 300 pesos los paquetes de 400 gramos, aunque en segundas y terceras marcas.
Si bien cuenta con una variedad de presentaciones, no hay marcas líderes, que seguramente tendrán los precios mucho más elevados.
De acuerdo con lo que se pudo saber, este año este tipo de artículos tendrán incrementos que rondan el 30 por ciento.
En otra cadena de supermercados ubicado en el microcentro, aún no contaban con el producto ni tampoco tenían precisión de a partir de cuándo lo empezarían a recibir. Lo cierto es que este año será más caro comer pan dulce porque tendrá un valor propio de la inflación de todo este tiempo.
SITUACIÓN
Vale destacar que según la publicación de EL LIBERTADOR, en estos días no se descarta el aumento del precio de todos los derivados de la harina.
La suba del dólar, ocurrida en las últimas semanas, sería el motivo de las remarcaciones aplicadas por los proveedores de las panaderías.
La harina, podría subir entre un 10 por ciento y un 15 y la materia grasa y derivados, entre un 40 y un 60 por ciento.
