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La capital correntina, vulnerable ante la inundación: falta de inversión y gestión

Las lluvias torrenciales, que superaron los 250 milímetros en pocas horas, colapsaron los sistemas de desagües de la ciudad

Las intensas lluvias de este fin de semana castigaron la ciudad de Corrientes provocando una inundación sin precedentes, dejando a miles de personas damnificadas.

La falta de inversión en infraestructura y la falta de respuestas desde la gestión oficial evidenciaron como las principales causas de este desastre.

Las lluvias torrenciales, que superaron los 250 milímetros en pocas horas, colapsaron los sistemas de desagües de la ciudad. Calles, avenidas y barrios enteros se vieron anegados, con niveles de agua que en algunos casos superaron el metro de altura. Viviendas, negocios y vehículos fueron destruidos por la fuerza del agua.

Las autoridades locales se vieron desbordadas por la magnitud del evento. La respuesta inicial fue lenta y desorganizada, dejando a muchos vecinos a su suerte. Los centros de evacuación se vieron rápidamente saturados y la asistencia a los damnificados fue insuficiente.

Esta catástrofe natural no es un hecho aislado. Las inundaciones son un problema recurrente en la ciudad de Corrientes, que se ha visto agravada en los últimos años por la falta de inversión en infraestructura y la ausencia de un plan integral de gestión del riesgo hídrico.

Los sucesivos gobiernos locales han ignorado las advertencias de los especialistas y no han tomado las medidas necesarias para prevenir este tipo de desastres. La falta de obras de desagüe, la limpieza deficiente de los canales y la construcción en zonas inundables son solo algunos ejemplos de la desidia que ha caracterizado la gestión del riesgo hídrico en la ciudad.

La comunidad se encuentra ahora en estado de shock e incertidumbre. Las familias damnificadas necesitan asistencia urgente para poder rehacer sus vidas.

La falta de inversión en infraestructura y la desidia en la gestión del riesgo hídrico han convertido a la capital correntina en una ciudad vulnerable a las inundaciones. Es urgente un cambio de paradigma en la gestión pública, que priorice la seguridad y el bienestar de la población.

Las últimas cuatro intendencias de Corrientes fueron encabezadas por Carlos Espínola, 2009-2013 (Partido Justicialista); Fabián Ríos, 2013-2017 (Frente para la Victoria); Eduardo Tassano 2017-2021 (Encuentro por Corrientes), y nuevamente Tassano, en la gestión 2021-2025.

Algunos datos relevantes en el marco del temporal de Corrientes

La Municipalidad de Corrientes declaró la ciudad en "estado de emergencia".

Se estima que hay más de 10.000 personas damnificadas.

Se han habilitado 10 centros de evacuación.

El gobierno nacional anunció el envío de ayuda económica y asistencia social.

Es hora de que la sociedad correntina exija a sus autoridades una gestión responsable y eficiente del riesgo hídrico. La ciudad no puede seguir siendo rehén de la desidia y la falta de inversión.

NA

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