En el barrio San Gerónimo, frente a la Casa del Bicentenario, un predio de importantes dimensiones está listo para recibir a vendedores del mercado Virgen de Itatí. Además, en el patio de comidas estarán los carritos que actualmente se encuentran reubicados en la plaza del barrio. La obra fue realizada con fondos provinciales en un predio cedido por el Municipio.
Son 109 los puesteros que llevan más de un año esperando reubicarse en un nuevo lugar donde desarrollar su actividad luego de que el galpón que ocuparon durante más de dos décadas se incendiara en abril de 2018. Los comerciantes fueron capacitados en atención al público y manejo de posnet y aunque el nuevo predio está listo, no hay fecha de inauguración.
En diálogo con este medio, uno de los delegados del mercado, Juan Lescano, destacó que si bien no tienen confirmación sobre cuándo será la mudanza, están al tanto de que el sitio está listo. “Estamos muy ansiosos por la mudanza porque las condiciones en las que estamos en la carpa son cada vez más complicadas”, resumió y admitió que ya fueron presentadas más del 80% de las carpetas a la Comuna, esperan que en pocos días finalicen. “Sabemos que esto depende de nosotros, por eso estamos colaborando para que todos los puesteros puedan presentar las carpetas lo antes posible”, explicó el vocero del mercado.
La carpa a la que fueron trasladados luego del siniestro en agosto del año pasado está ubicada en la plaza del Mercosur, frente a la Rotonda de la Virgen de Itatí en el ingreso a la ciudad, pero el paso del tiempo y las condiciones climáticas fueron deteriorando las instalaciones. “Con cada lluvia tenemos problemas, la carpa se rompe y los puesteros pierden mucha mercadería”, sintetizó Lescano.
Con el paso de los días y los problemas que se suman, la ansiedad crece: “Estos días los estamos pasando muy mal. La semana pasada con el calor, las personas mayores no se podían quedar ahí porque se descomponían”, explicaron otros puesteros del lugar.
A la espera de definiciones concretas, los trabajadores se ilusionan con la idea de poder realizar las ventas de fin de año en el nuevo sitio. “Ya pudimos entrar a ver y la verdad es que nuestras condiciones de trabajo van a cambiar mucho, todos vamos a tener nuestros puestos cubiertos. Si llueve la mercadería y los vendedores van a estar a resguardo, que es lo más importante para nosotros”, remarcó Lescano y precisó que otro de los puntos a favor es que habrá más afluencia de personas. “Contar con un sitio que sea lindo y cómodo hará que mucha más gente nos visite, sumado a que va a haber un patio de comidas, sanitarios y vestidores”, resaltó el referente consultado por este medio.