El animal fue capturado por un vecino de Pocho, que logró reconocerla. Se trata de una boa arcoíris argentina. Video. La “Boa Arcoíris Argentina” es una serpiente no venenosa que pertenece a la especie Epicrates alvarezi, endémica de Argentina.
Se caracteriza por su coloración vibrante y patrones de colores variados, que a menudo incluyen tonos de rojo, naranja, amarillo, verde y azul, lo que le otorga su nombre distintivo de “arcoíris”.
Esta especie habita principalmente en regiones selváticas y subtropicales del norte de Argentina, como las provincias de Misiones y Corrientes. También en el norte y oeste de Córdoba. La boa arcoíris argentina es apreciada tanto por su belleza como por su papel en el equilibrio ecológico de su hábitat natural.
Gran sorpresa se llevó un vecino de la localidad cordobesa de Chancaní (departamento Pocho) al encontrarse con una serpiente en peligro de extinción. El hallazgo del animal logró ser capturado por las cámaras y la imagen de la especie recorrió las redes sociales de la región.
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Si bien en la región es habitual la presencia de serpientes, en este caso, apareció un ofidio muy particular. Se trató de una boa arcoíris argentina que apareció sobre el camino. El usuario @gu.stavo1411 subió las imágenes.
FILMARON UNA SERPIENTE ARCOÍRIS EN CÓRDOBA
La especia es típica del centro de América del Sur, y en Argentina se puede encontrar en provincias como Córdoba, Chaco, Corrientes, Formosa, Chaco, Santiago del Estero y Tucumán. Se conocen como boas arcoíris porque bajo el sol presentan un resplandor multicolor de coloración iridiscente.
Pueden llegar a medir dos metros de largo, y son solitarias y de hábitos nocturnos y crepusculares. Por lo que, son muy difíciles de ver y poco abundantes ya que la especie está en peligro de extinción.
La especie en peligro de extinción fue fotografiada en el departamento de Poncho.
LA SERPIENTE ARCOÍRIS ¿ES VENENOSA?
La boa arcoíris no es venenosa. El ofidio se alimenta de murciélagos que caza en las noches, también de roedores, aves, lagartijas y anfibios.
Es una serpiente inofensiva que mata a su presa por constricción, utilizando los músculos de su cuerpo para asfixiarla y provocarle un paro cardíaco.Los reflejos de su piel al sol son tornasolados, por eso se la llama “arcoíris”.
La boa arcoíris argentina (Epicrates alvarezi), también conocida como boa arcoíris chaqueña, boa jarillera, boa enana y boa de terciopelo, es una especie no venenosa de serpiente constrictora nativa de las regiones cálidas y semiáridas del centro de América del Sur.
Boa arcoíris argentina
Características:
Tamaño: Las boas arcoíris argentinas son serpientes de tamaño mediano, con una longitud corporal que oscila entre los 100 y 180 cm. Las hembras son generalmente más grandes que los machos.Coloración: Su nombre común se debe a su patrón de escamas iridiscente que cambia de color dependiendo de la luz. El color base suele ser marrón o grisáceo, con manchas negras o marrones a lo largo del cuerpo. Las escamas del vientre son de color blanco o crema.Hábitat: Habitan en una variedad de hábitats secos, incluyendo bosques, sabanas, pastizales y zonas rocosas. Prefieren áreas con acceso a agua, como arroyos o ríos.Comportamiento: Son serpientes nocturnas y pasan la mayor parte del tiempo escondidas en madrigueras, árboles o arbustos. Son cazadoras solitarias y emboscan a sus presas.Dieta: Se alimentan principalmente de roedores pequeños, como ratones, ratas y ardillas. También pueden comer pájaros, lagartos y serpientes pequeñas.Reproducción: Las boas arcoíris argentinas son ovíparas. Las hembras ponen de 10 a 20 huevos a la vez, que incuban durante unos 60 días. Las crías nacen independientes y miden alrededor de 30 cm de largo.
Estado de conservación:
La boa arcoíris argentina se encuentra en estado de Preocupación Menor (LC) según la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN. Sin embargo, las poblaciones se ven amenazadas por la pérdida de hábitat, la caza y el comercio ilegal de mascotas. En la Argentina está considerada en la categoría de: Amenazada.
Importancia ecológica:
Las boas arcoíris argentinas son un componente importante del ecosistema al controlar las poblaciones de roedores. También son una fuente de alimento para otras especies, como aves rapaces y mamíferos carnívoros.
Si te encuentras con una boa arcoíris argentina
Mantén la calma y no te acerques. Las boas arcoíris argentinas no son agresivas con los humanos, pero pueden morder si se sienten amenazadas.Observa a la serpiente desde una distancia segura. No la molestes ni la intentes atrapar.Si la serpiente está en un área donde podría ser un peligro para las personas o las mascotas, comunícate con un profesional de vida silvestre.
Con información de La Voz
