La marca de ayer fue inferior a las de jornadas anteriores que ya se habían convertido en registros históricos por el escaso caudal.
Especialistas señalaron que esperan una paulatina recuperación, que podría darse para mediados de año.Aunque la tendencia en bajante del Paraná se mantiene desde hace bastante tiempo, los registros que se dieron en los últimos días resultan realmente llamativos por el escaso caudal que conserva en general y, específicamente, en las mediciones realizadas en la costa capitalina.
Tanto es así que en lo que va de abril ya se había registrado un récord en este sentido, aunque la marca de ayer terminó siendo aun inferior según informaron desde Prefectura Naval Argentina.
De esta manera, la altura del río fue ayer de 1,18 metro, un centímetro menor a la que se había repetido en varias jornadas de la semana pasada. Luego, hubo un leve repunte, pero finalmente se batió un nuevo récord si se toman en cuenta los últimos cincuenta años.
Es que, según señalaron varios especialistas en el tema, en esta zona el Paraná no tenía un caudal tan escaso desde 1971, por lo que la bajante actual sigue sumando factores para ser considerada histórica.
Más allá de los escasos registros, lo cierto es que resulta llamativa la extensión de la tendencia que no cambia desde mediados del año pasado, cuando bajó de los 3 metros y ya no volvió a aproximarse a esos valores.
En cambio, uno de los registros más repetidos, sobre todo en el inicio de este año, fue el de 2 metros con algunos leves altibajos, pero sin cambios de consideración ni sostenidos.
En abril del año pasado, el río tenía un nivel que rondaba los 4 metros, por lo que los niveles actuales se vuelven aún más inusuales para esta época, aunque existen factores naturales que se conjugaron para que se diera esta situación.
Así lo señalaron desde el Instituto Nacional del Agua (INA), asegurando que fueron varias las condiciones que permitieron una bajante de este tipo.
Por su parte, los especialistas advierten que en el corto plazo, es decir, en las próximas dos semanas, el Paraná no mostrará grandes cambios y se espera que se mantenga en la altura actual o con algunos leves movimientos.
Más allá de esto, en el mediano plazo podría darse ya una recuperación en el caudal del río de acuerdo con las previsiones meteorológicas, teniendo en cuenta que actualmente todos los afluentes se encuentran con un escaso nivel.
De esta manera, antes de mediados de año, es decir, en los próximos dos meses aproximadamente, podría revertirse la tendencia en bajante y el río recuperaría paulatinamente su nivel medianamente habitual, dependiendo siempre de las condiciones del tiempo de la región y de sus afluentes.
En este sentido, desde el INA recordaron que ya se dieron circunstancias en que el primer semestre estuvo marcado por la sequía y un escaso nivel del río, mientras que en la segunda parte del año se dieron complicaciones con la creciente, por lo que estiman que el caudal del Paraná, según las previsiones realizadas, comenzará a recuperarse en el mediano plazo, justamente cuando cumpla un año en bajante.
