Entra en vigencia la medida nacional que establece el troceo de la media res para su distribución. Hay incertidumbre y algunos productores adelantaron que no ingresarán hacienda para la faena. Crece la preocupación en el sector.
Mañana entra en vigor una nueva normativa que obliga a los frigoríficos a trocear la media res para que llegue en tres partes a las carnicerías. Con el objetivo de evitar que los repartidores deban cargar más de 100 kilos sobre sus espaldas, la ley busca también optimizar la rentabilidad de los carniceros, que ahora podrán comprar los cortes que más venden y no bajar aquellos que tienen escasa demanda.
La resolución está generando un fuerte debate y si bien algunos sectores catalogan la medida como positiva, otros advierten que en realidad traerá más complicaciones que beneficios.
Tanto es así que la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (Fifra) anunció que realizarán una medida de fuerza que se comenzará a aplicar en parte hoy. Tienen previsto no recibir hacienda y a partir de mañana suspender las faenas y la distribución. En Corrientes se espera que no haya una adhesión fuerte a esta medida, aunque sí creen desde el sector que habrá ciertas complicaciones con el abastecimiento.
En ciertos frigoríficos -aunque abrirán sus puertas- los productores ya avisaron que no ingresarán animales o lo harán en menor cantidad, debido a que reina una gran incertidumbre sobre la forma en la que se aplicará la nueva disposición del Gobierno nacional. Por eso, si bien no habrá faltante, sí adelantaron que seguramente se dará una merma en la oferta de cortes de carne esta semana en la provincia, que podría hacerse más visible en caso de que la demanda crezca al menos ligeramente.
El argumento más fuerte a favor del troceo de la media res es el de la necesidad de proteger la salud de los repartidores, aunque señalaron desde el sector que muchos ya cuentan con sistemas de grúas y que en todo caso debería controlarse el cumplimiento de ese requisito.
Pero separar la media res representa un gasto extra y complicaciones operativas que deben enfrentarse sin la información necesaria. "Preguntamos varias cosas y no supieron que contestarnos", dijo ayer a República de Corrientes una persona cercana al rubro.
Etiqueta
Además, existe otra disposición que obliga a abandonar el tradicional sellado y pasar a un etiquetado con papel impreso, hecho a computadora. Los cortes y las cámaras tienen un alto grado de humedad, factor que puede generar también problemas al momento de cumplir con las nuevas medidas de la Nación. Además, esto también representará un encarecimiento del proceso que -advierten- se trasladará seguramente a las bateas; es decir, al consumidor.
Por eso, en los frigoríficos podría incrementarse el costo unos $ 300 más IVA por media res de carne vacuna y $ 150 más IVA por cada cerdo. En tanto los carniceros, con escasa información por el momento, no saben aún cómo se seguirá trabajando y la incertidumbre genera una fuerte preocupación.
Además, al estar en trozos, aseguran que los cortes ocuparán mayor espacio en el camión para el traslado. "Van a ir colgados y la parte de abajo va a quedar vacía; en vez de tres viajes serán necesarios seis", advirtieron desde el sector, poniendo sobre la mesa un tema que por el momento no se había tomado en cuenta y por el que no hay respuestas oficiales aún. Este será también -aseguran- un factor de encarecimiento que repercutirá en el precio final de la carne.
Infraestructura
Si bien algunos frigoríficos están adaptados para operar con esta nueva modalidad, advierten que la suba de costos es prácticamente inevitable. Además, estiman que hay unos 300 centros de faenado que no cuentan con la infraestructura necesaria ni con los fondos para hacer las modificaciones pertinentes, por lo que también hay alerta por posibles cierres o pérdidas de puestos de trabajo.
Si entre en los frigoríficos y entre los distribuidores hay incertidumbre, en las carnicerías el panorama es aún más confuso. Los carniceros aseguran no estar al tanto y muchos manejan solo la información que leyeron en las noticias. "Así dicen, pero pregunté y la verdad es que nadie me supo decir", comentó un comerciante del sector que trabaja en uno de los barrios más populosos de la capital.
Por el momento, y a pesar de varios pedidos formales para que la medida se postergue, parece que la intención del Gobierno nacional es sostener el inicio de la nueva modalidad a partir de mañana, además de activar controles para detectar posibles incumplimientos.
A solo un día de que entre en vigencia la ley, la confusión es tal que las dudas alcanzan al ingreso de la hacienda en los frigoríficos, la salida de la carne de estos establecimientos, su traslado, la llegada a las carnicerías y los precios en la batea. Con más incógnitas que certezas, desde mañana comenzará a aplicarse -al menos parcialmente- una nueva forma de distribución de la carne para abandonar el histórico sistema de la media res.
