El entrenador brasileño Cuca fue expulsado de Corinthians a seis días de haber sido contratado a raíz de que fue revelado que había sido condenado a prisión en 1987, en Suiza, por violar a una adolescente de 13 años durante una gira que que había realizado cuando se desempeñaba como jugador de Gremio.
El caso de Cuca generó un gran escándalo en Brasil al conocerse que fue condenado a 15 meses de prisión en Berna, y el propio equipo femenino de fútbol del club paulista había reclamado a la dirigencia que no lo contratara.
Alexi Stivel, Cuca, es uno de los más importantes entrenadores de Brasil, que incluso fue campeón de la Copa Libertadores 2013 dirigiendo al Atlético Mineiro de Ronaldinho Gaúcho. "Fui víctima de una masacre en los últimos días", dijo Cuca en la conferencia de prensa en la que anunció su desvinculación con Corinthians, luego de la victoria por penales ante Remo de Belém, por la Copa de Brasil.
Los futbolistas del equipo fueron a festejar con Cuca luego de la victoria, mientras se realizaban manifestaciones del ala femenina de Corinthians para que el club despidiera al entrenador.
Con la contratación de Cuca en Corinthians, fue reflotado el caso de condena contra el DT a 18 meses de prisión por violación de una adolescente en 1987 cuando tenía 24 años y realizaba por Suiza una gira con el club donde jugaba, en Gremio de Porto Alegre. Cuca y otros tres futbolistas fueron detenidos en un hotel de Berna: de acuerdo a la reconstrucción de la prensa brasileña, los jugadores pagaron el equivalente a ocho mil reales de fianza y fueron juzgados en ausencia, condenados a 15 meses de prisión efectiva, que no se cumplieron porque Brasil acostumbra a negar las extradiciones.
"Fue una pesadilla, una masacre en mi contra. Lo que estoy pasando, y quiero ser muy breve porque no quiero ser víctima de nada, es lo peor que puede pasar un hombre. Cuando su dignidad está en jaque. Cuando se invade las redes sociales de sus hijas y esposa con amenazas y ofensas terribles", se victimizó Cuca.
El caso ganó fuerza con la entrevista que el sitio UOL realizó la semana pasada con el abogado de la víctima de la violación, el suizo Willi Egloff, que dijo que Cuca fue reconocido como uno de los violadores. El entrenador alegó que era inocente y que no tuvo responsabilidad en lo ocurrido en la habitación en la cual estaban cuatro jugadores de Gremio en 1987 con una adolescente de 13 que fue a conocer a los brasileños.
Egloff también recordó que los exámenes forenses arrojaron rastros de semen de Cuca en el cuerpo de la niña, según informó en su momento el diario Der Bund. Pese a la condena y a la gravedad del caso, Cuca desarrolló su carrera exitosa como futbolista y como técnico durante casi cuatro décadas, hasta que ahora se reavivó lo sucedido aquella noche en Suiza.
