Jugó en Portland y en Sacramento, engordó 65 kilos en 36 meses y a los 25 años falleció de causas naturales.
Caleb Swanigan irrumpió en la NBA tras ser elegido en el Draft de 2017, su historia de superación para vestir los colores de los Portalnd Trail Blazers estuvo en la boca de todos y este lunes, tan sólo a 5 años de lograr llegar a la liga de básquet más competitiva del mundo fue encontrado muerto de causas naturales con 25 años.
"Estamos devastados. Nuestros pensamientos y oraciones para la familia y los amigos de Caleb Swanigan. El mundo perdió un alma amable. Te queremos, Biggie", escribió este martes en Twitter el perfil oficial del equipo de Purdue, donde Swanigan jugó en su época universitaria. Allí destacó especialmente en su segunda temporada registrando 18,5 puntos, 12,5 rebotes y 3,1 asistencias de media por encuentro, lo que le abrió las puertas de la NBA. Así, el jugador fue escogido en el puesto número 26 del draft de 2017 por los Blazers.
En los dos años siguientes, hizo un viaje de ida y vuelta ya que pasó de los Blazers a los Kings y posteriormente regresó a Portland. Swanigan optó por no jugar los partidos de la NBA en la "burbuja" de Orlando en 2020 por "razones personales" y ya no regresó a las canchas. En total, Swanigan disputó 75 partidos de la NBA en tres temporadas de 2017 a 2020 en los que consiguió 2,3 puntos y 2,1 rebotes de media por encuentro.
Durante su carrera en la NBA, Swanigan trabajó mucho con los jóvenes del área de la ciudad y FoodCorps para promover hábitos alimenticios saludables en las escuelas y eliminar el hambre infantil. Biggie apareció por última vez en las noticias en 2021 y allí se vio el enorme cambio físico que tuvo al pesar cerca de 200 kilos, aproximadamente 65 más que sus últimos partidos en las NBA durante 2019.
Caleb aguantó todo lo que pudo a las distintas presiones que le presentó la vida hasta que ayer, a los 25 años de edad, su cuerpo decidió ceder.
Conmoción en la NBA por la muerte de Caleb Swanigan: su dura historia de vida
Su padre Carl Swanigan Sr. enfrentó permanentemente su adicción al crack y es por ello que su madre fue quien se encargó de criarlo sola a él y a sus cinco hermanos. Vivían en refugios para personas sin hogar en Utah o también, por momentos, debajo de un puente. Su progenitor falleció en 2013 por complicaciones relacionadas con la diabetes cuando tenía 50 años y, según informó ESPN en 2017, pesaba casi 227 kilos en el momento de su muerte. Ostentaba un altura de 2,07 metros.
Dicho potente físico heredado fue aprovechado por Caleb quien lucía 2,06 metros y una gran contextura física para adentrarse en el mundo del deporte. En ese momento se contactó con Roosevelt Barnes, un viejo conocido de la familia que se dedicaba a promocionar deportistas en la élite del país. En 2010 era un niño obeso al que la vida le había dado la oportunidad de una vida mejor. Cabe destacar que siempre luchó contra su peso, siendo una de esas personas genéticamente predispuestas engordar con gran fácilidad.
“Una de las últimas veces que lo vi, un día de práctica en el torneo de la NCAA de 2017 en Kansas City, estaba montando una bicicleta estacionaria. Llevaba un buzo, del tipo que usan los luchadores para perder peso antes del pesaje. Incluso entonces, un atleta universitario de solo 20 años, Biggie ya estaba luchando contra las inclinaciones naturales de su cuerpo”, contó uno de los periodistas del portal USA Today sobre las complicaciones de Caleb con su peso a temprana edad.
Sin embargo, Biggie siguió luchando contra sus problemas genéticos y de alimentación que iniciaron durante su temprana vida en Fort Wayne. Llegó a la Universidad de Purdue en 2015 después de ser nombrado Indiana Mr. Basketball, premio al mejor jugador de dicho estado, mientras asistía a la secundaria de Homestead. Originalmente se comprometió con la Universidad de Michigan, pero terminó en West Lafayette donde jugó dos temporadas con los Boilermakers y fue seleccionado en el primer equipo All-American, ganando el honor del Big Ten Player of the Year en 2017.
El sentido mensaje de Lillard por la muerte de Caleb Swanigan, a quien había defendido de las críticas
La estrella de los Portland Trail Blazers criticó la cuenta que se burlaba de la apariencia de Caleb Swanigan a través de los comentarios dentro de la publicación. Estaba claro que Lillard sabía los problemas por los que estaba pasando Swanigan cuando compartieron un breve período juntos en los Trail Blazers. "Rest In Peace Big ????????", escribió Lillard en su cuenta personal de Instagram.
