Una inversión millonaria. Quedan muy atrás aquellos años de Wenger en los que la contención económica era una de las señas de identidad de los gunners. La propiedad actual le ha dado a Mikel Arteta todas las herramientas posibles para desafiar al Liverpool y al Manchester City y pelear por ganar una Premier que se resiste desde 2004, el año de los llamados Invencibles. En la Champions, tras llegar la temporada pasada a semifinales eliminando al Real Madrid en cuartos, la ambición también es máxima. Y es que a esa plantilla, que ya era fuerte, hay que sumarle un goleador como Gyökeres, un medio centro de la inteligencia de Zubimendi, un extremo con el desequilibrio de Eze e incluso recursos que a priori no llegan para ser titulares pero que complementan fantásticamente el fondo de armario como Hincapié, Mosquera, Norgaard y Madueke. Entre todos ellos, el club ha gastado alrededor de 300 millones de euros, lo que eleva la exigencia para un entrenador que está haciendo un muy buen trabajo pero que sólo ha podido levantar una FA Cup y dos Community Shields desde su llegada al banquillo en diciembre de 2019.
Fuente: https://as.com/opinion/arsenal-el-ano-del-asalto-al-poder-n/
