Este lunes se conmemorará el centenario del nacimiento de uno de los músicos correntinos más importantes de la historia. Tarragó Ros, conocido como El Rey del Chamamé, quien fue un músico y acordeonista de chamamé y música litoraleña que marcó el curso del género con sus composiciones.
Nacido el 19 de junio de 1923 en Curuzú Cuatiá, se inició en la música con la armónica unto a su hermano Antonio, para luego incursionar en el piano y colaborar con la Orquesta Típica Hernández.
Durante la década del 40 viajó por primera vez a Buenos Aires con aspiraciones de consolidar sus destrezas artísticas. Lo hizo con la invitación de Carlos Castellán y Pedro Sánchez para integrar el Trío Taragüi. Más tarde, regresó a su pueblo natal para formar el conjunto Melodías Guaraníes junto al bandoneonista Adolfo Bargas.
El éxito de estos grupos lo acercó al sello discográfico Odeon, donde desarrolló sus primeras grabaciones que lo transformaron en uno de los grandes chamameceros de la época. Y es que sus trabajos se vendían con celeridad.
Tras ello sólo pudo seguir creciendo, llegando a recibir tres Discos de Oro, el Monumento de Cristal, la Lira de Plata, el Disco Platino y el Templo de oro, lo que lo conivrtió en uno de los artistas chamameceros más galardonados de la historia.
Tarragó Ros encontró en el desarrollo del chamamé una manera de componer que lo transformó en uno de los cuatro referentes en la composición, junto a Tránsito Coco Marola, Hernesto Montiel y Mario Millán Medina. Junto con ellos, conformaron las vertientes principales que se convirtieron en las raíces de la música del litoral hasta el día de hoy.
