Al menos 41 presuntos miembros de Al Qaeda, incluidos jefes, así como al menos 16 mujeres y niños, murieron este domingo en un ataque aéreo atribuido a Estados Unidos en el centro de Yemen. La operación militar, la primera de envergadura desde la llegada de Trump al poder, se produjo a primera hora de la mañana en Yakla, en la provincia de Baïda.

 

Según una fuente anónima citada por la agencia AFP, drones y helicópteros Apache atacaron un colegio, una mezquita y un dispensario que servían de refugio a combatientes de Al Qaeda. Otras fuentes tribales dan cuenta de la presencia sobre el terreno de comandos y soldados estadounidenses.