El presidente de Brasil, Michel Temer, consiguió el miércoles los votos suficientes en la Cámara baja del Parlamento para bloquear acusaciones de corrupción en su contra por supuestos sobornos, que lo habría llevado a afrontar un juicio ante el Supremo Tribunal Federal.
El mandatario había decidido enviar sus ministros al Congreso para garantizar todo el respaldo posible a fin de impedir la apertura de un juicio a partir de la denuncia por corrupción presentada por la Procuraduría General de la República.
Si la Cámara baja autorizaba el inicio del proceso, obligaba a Temer a licenciarse del cargo por 180 días, período durante el cual iba a ser reemplazado por el presidente de Diputados, Rodrigo Maia.