El fiscal federal Carlos Schafer dijo que "lo sucedido con Soto Dávila es de suma gravedad. Existen escuchas telefónicas, mensajes de texto, ubicaciones y resoluciones mismas del magistrado", comentó. "El valor que le damos a los arrepentidos es importante siempre y cuando corroboremos la veracidad de los dichos", aseveró.
"Desde que pasaron los hechos la semana la ciudadanía entendió que esto es un hecho de gravedad y necesita respuestas", comentó.
"Esto es un mecanismo que denunciamos, qué pasaba en el Juzgado federal, no es un hecho aislado", indicó en Radio Dos.
"Hay pruebas suficientes para que sea indagado", aseveró.
Una investigación que dura dos años no se basa solamente en arrepentidos
"Hace más de dos años comenzamos la investigación. Entendemos que Soto Dávila debe ejercer su derecho de defensa", apuntó.
"Está constatado que Faraone y Marín estuvieron en la casa de Soto Dávila", expuso Schaefer.