En la tarde de este jueves aun no se había encontrado lo que constituye la única “prueba” de las acusaciones de corrupción contra empresarios y funcionarios nacionales.

 

 

El fiscal Carlos Stornelli que interviene en la causa ya había realizado dos allanamientos. Uno en Olivos, donde se encuentra la casa de Centeno, y otro en la localidad de Bella Vista.

 

 

Sin embargo, no se confirmó hasta el momento el hallazgo de lo que constituiría la principal prueba para la acusación que se realiza contra empresarios y ex funcionarios nacionales.

 

 

El dato no resulta para nada menor. Desde la madrugada de este miércoles, un enorme operativo político y mediático se desarrolla. El mismo implicó la detención de más de una decenas de personas.

 

 

La denuncia de los cuadernos copó las pantallas y páginas de los principales medios aliados al Gobierno, intentando darle un respiro en medio de los efectos de la crisis económica y el escándalo por los aportantes truchos que golpean centralmente a la administración de María Eugenia Vidal. Difícilmente la repercusión de la investigación pudiera hacer olvidar la difícil situación, pero el hecho de que los cuadernos no aparezcan embarra aún más la cancha y deja más dudas que certezas para un Gobierno al que lo único que le sobran son malas noticias.