Blas García y  Zulma Cáceres son los papás de Agustina (11 años) y se acercaron hasta los estudios de La Dos para aclarar la situación que se presentó ayer tras la grave denuncia de  Fabio Cabañas, quién contó que a su hija de 8 años le enviaron mensajes obscenos en el celular. El matrimonio aseguró que todo fue una broma de su hija, y que ni siquiera conocía a la otra nena.



Blas García es el papá de la nena que habría realizado los mensajes, y explicó: “el 17 de julio le compré a mi hija el celular para que esté comunicada con nosotros, ella es menor, tiene 11 años”.

 

El número en  cuestión es el 3795-076980, tal lo denunció ayer Fabio Cabaña, que aseveró que los mensajes tenían una clara intencionalidad.

 

La línea es de la empresa Claro.

 

“Ayer me enteré de esto, pero creo que ella fue la que hizo esto. Y me dijo que hizo una broma”, contó.



A su vez, con el permiso de sus padres, Agustina habló de lo sucedido: “no le conozco a la otra nena, lo hice por hacer una broma. En la escuela contré en un papelito el número y por eso mandé los mensajes”.

 

“No le presté el celular a nadie, yo misma mandé los mensajes el lunes”, afirmó en Radio Dos.

 

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Nena de 8 años es acosada por mensajes de textos a su celular

 

Fabio Cabaña, trabajador de la Subsecretaría de Trabajo, denunció ante los medios de prensa que su hija de tan sólo 8 años es víctima de acoso y hostigamiento. Una persona desconocida  envió varios mensajes de texto al teléfono celular de la pequeña en el que pide “conocerla” y agrega “sos muy linda”.

 

El preocupante hecho ocurrió durante el fin de semana cuando una pequeña de tan sólo 8 años comenzó a recibir extraños mensajes de texto de un número desconocido a su teléfono celular.

 

“Hola ¿Cómo estás?” “Hola, soy Facundo, quiero conocerte”. “Si contestás es porque te gustan los hombres y si no lo haces es porque te gustan las mujeres”, son los mensajes que la menor comenzó a recibir como catarata entre el sábado 23 y el lunes 25 de septiembre.



“Mi hija me mostró y me comentó lo que sucedía. Estaba realmente muy asustada y quiero alertar a la población de esto que ocurre”, dijo Cabaña en contacto con Radio Sudamericana.



Tras una serie de averiguaciones, los padres de la niña descubrieron que el número del cual provenían los mensajes pertenecía a la línea CLARO, aunque desconocen el nombre del titular. El número 3795-076980 está siendo investigado.