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Lentes de contacto: todo lo que debes saber antes de usarlas

Esto probablemente por la comodidad y flexibilidad que ofrecen. Además, como no se ven, también contribuyen con tu imagen facial mientras corrigen o contrarrestan los efectos de los problemas de visión. Pero, aprendamos más sobre estos recursos visuales.



¿Para qué sirven los lentes de contacto?

Estos son pequeños lentes que han sido graduados según la necesidad del paciente. Se llaman de contacto porque precisamente están “en contacto” con tus ojos. Los mismos están diseñado para corregir problemas de refracción, así como ayudan a preservar tu salud ocular.

Los lentes de contacto se colocan sobre la superficie de la córnea, flotando sobre la película lagrimal. Actualmente, hay muchos modelos modernos que se adaptan bien a los ojos. Sin embargo, estos funcionan parecido a las gafas. Y es que refractan la luz, enfocando los objetos con mayor claridad.

Como se unen al fluido lagrimal, los lentes se mueven de forma natural junto con el ojo. Pero, esta es tan solo la primera de muchas ventajas que tienen los lentes de contacto. Pero, primero veamos los tipos de lentes que existen.



Tipos de lentes de contacto

Al igual que las gafas, hay variedad de lentes de contacto. Estos se diseñan según la necesidad de cada persona. Además, varía en la modalidad y frecuencia con la que se usa. Es así como pueden ser diarias, quincenales o mensuales. El uso dependerá de la necesidad para corregir un problema, como por ejemplo astigmatismo o miopía.

También se clasifican según su graduación o dioptría. Para saber cuál es la graduación de la lentilla solo tienes que revisar el número que está en la caja. Verás un signo de + o – seguido de un número. Aun así, es necesario que acudas al optometrista para establecer bien la graduación de tus lentes de contacto.

Hay dos tipos de lentes que debes conocer: lentes tóricos y esféricos. Los primeros son gruesos en la parte inferior y sirven para corregir un problema de visión. Mientras que los lentes esféricos son iguales en toda la circunferencia. Estos ayudan a corregir la hipermetropía y la miopía. También encontrarás en el mercado lentes bifocales, multifocales y de monovisión.



¿Necesito receta para usar lentes de contacto?

Si. Toda persona que necesita usar gafas y quiere optar por los lentes de contacto, necesita receta. Esto se debe a que no son unitalla. Por eso, debes hacerte un examen de la vista para recibir una prescripción médica sobre la graduación de los lentes. También, el médico es el que indicará si podrás usar lentes de contacto pues, los pacientes con alergias no deben colocarse de estos.

La receta de las lentillas da información sobre el fabricante y material que debe usarse en el lente. También indica la curca base o dignación, así como el diámetro del lente de contacto.

Antes de comprarlos, es importante que tengas en cuenta algunos consejos:

  • La receta del optometrista debe estar vigente.
  • Hacer un pedido con un distribuidor o tienda de confianza.
  • Solicitar instrucciones del uso de los lentes de contacto.
  • Asegurarse que la graduación, esfera, cilindro, eje, curva base, curvas periféricas y diámetro sean correctos, tal como lo indica la receta.


Evitar lesiones o infecciones

Uno de los riesgos que hay de usar lentes de contacto es una infección. Esto porque el ojo es muy sensible y se puede exponer a irritación, abrasiones corneales y conjuntivitis. Las úlceras corneales son bastante frecuentes por el uso de lentes de contacto ya que, la capa exterior de la córnea está en contacto con el lente. Así que, es necesario mantener bien limpias las lentillas.

Con el fin de evitar infecciones o lesiones, ten en cuenta los siguientes consejos:

  • Reemplazar el estuche de los lentes por lo menos cada tres meses.
  • Limpiar y desinfectar los lentes según instrucciones del fabricante.
  • Quitarse los lentes para nadar.
  • No reusar la solución para lentes de contacto.
  • No exponer los lentes al agua.
  • No llevarse las lentillas a la boca o usar saliva para limpiarlos.
  • No transferir soluciones la solución de un envase a otro.
  • No acostarse con los lentes de contacto puestos a menos que el oculista así lo indique.
  • Atender inmediatamente cualquier síntoma de irritación o infección en los ojos.

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