Opinión del Lector

Joe Biden, el PSG de Messi y los millones opacos de la vergüenza

Steve Jobs, además de un genio fue un oportunista. Hace 35 años se dedicó a tejer una red de filiales para aprovechar las ventajas tributarias que ofrecía Irlanda. Trasladó el grueso de sus beneficios mundiales a la pequeña ciudad de Cork, para ahorrarse miles de millones de impuestos. Desde allí utilizó lo que se conoce en la jerga fiscal como el “doble irlandés” o “sandwich holandés”, un doble de jamón y queso impositivo que le permitía una tributación reducida de dichos ingresos, además de una “pantalla” financiera adecuada para desviar el grueso de las ganancias a paraísos fiscales.

Apple abrió el camino que siguieron compañías como Google, Microsoft, Facebook o Amazon. Hoy la ciudad de Cork es un apacible “puerto pirata”, sin parche en el ojo, donde se refugian cientos de corporaciones multinacionales. El Observatorio Fiscal de la Unión Europea recoge una extensa lista de compañías instaladas muy a “gusto” en este universo cálido de la evasión.


Una de ellas es el holding empresarial Qatar Sports Investments, dueño del París Saint-Germain, que desde la ciudad desarrolla el grueso de su actividad financiera. Se estima que los interestelares “ceros” del traspaso de Messi se diseñaron desde aquí, así como la “fabricación” anual de los 1.169 millones de euros del presupuesto del primer equipo francés. La agencia de investigación ProPública considera por debajo del 3% la tributación media empresarial de la ciudad. Millonarios beneficios “licuados” que erosionan las arcas públicas de los Estados. Hoy, la desapacible fiscalidad irlandesa puede tener los días contados. Hace unas semanas, Joe Biden presentó un decreto con 72 iniciativas a cargo de doce agencias federales: “No más evasión fiscal encubierta. No más tolerancia frente a las acciones abusivas de los monopolios. No más nocivas fusiones que den lugar a despidos masivos”, manifestó.

Escuchar un discurso tan social de un Biden nacido políticamente en el paraíso fiscal de Delaware y votante de las rebajas fiscales de Reagan en los ochenta, nos hace pensar cuánto habíamos retrocedido. El anciano mandatario oxigena su política económica con medidas tan “bolivarianas” que resultan desconcertante para los organismos internacionales. El 1 de Julio -en una iniciativa impulsada por EEUU y el G20- 131 países firmaban un acuerdo histórico para reformar el sistema fiscal internacional. La joya de la corona es una imposición mínima global del 15% en el impuesto a las sociedades. Muy alejado de la evasiva “gimnasia” impositiva de hoy. Qatar Sports Investments es un “gimnasta” afamado. Un holding acusado -con sentencia firme- de opacidad fiscal, oscurantismo tributario, y de vulnerar, sistemáticamente, el fair play financiero. Una joyita.

A Messi lo arrancaron de un Barcelona endeudado para refugiarlo en un sofisticado “lobby” presidido por unos “Jeques Magos” que operan desde el Oriente de Corleone. Menos mal. Uno se queda más tranquilo. Leo está más protegido.

El máximo dirigente del París Saint-Germain, el qatarí Nasser Al-Khelaifi, fue imputado por la Fiscalía General Suiza, junto al ex número dos de la FIFA, Jérome Valcke, por delitos de corrupción y sobornos en la compra de los derechos televisivos del 2018 al 2030 de los Mundiales y la Copa Confederaciones de la FIFA. La Fiscalía helvética lo sentó en el banquillo acusado de “cometer administración criminal agravada por falsificación de documentos”. La imputación de Valcke viene determinada por aceptar supuestos sobornos millonarios a través de una empresa pantalla que operaba sobre el alquiler de una mansión en Cerdeña (Italia), tapadera del Qatar Sports Investments. Gianni Infantino debió declarar en el juicio como ex máximo ejecutivo de la UEFA, acusado de facilitar prebendas y ocultar desmanes financieros de la entidad parisina. Son solo algunos de los numerosos problemas del holding con la justicia. La privatizada “pelotita” no descansa. Tan inocente ella. Tan integrada en el “establishment". Es verdad. Uno se siente más tranquilo. Ahora Leo está más protegido.

* Ex jugador de Vélez, campeón del Mundo en Tokio 1979.

Autor: José Luis Lanao

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