Los dos estaban cazando cuando al hombre se le escapó un disparo de una escopeta, que había pedido prestado a un amigo. Tampoco era cierto que estaba su madre en el lugar. Ya declaró y quedó en libertad. El niño evoluciona favorablemente de sus lesiones.



El caso del menor baleado en Goya, mientras se encontraba con su padres en proximidad del río Corriente, tomo ayer un giro inesperado. Su propio padre confesó haber sido el autor del disparo en forma accidental, mientras él y su hijo se encontraban cazando. El arma era prestada, de un amigo del hombre quien ayer la Policía citó a declarar. Pese a la gravedad del caso, el Juez dispuso su libertad.



Inicialmente había trascendido por la versión de los padres de la criatura, quienes lo llevaron hasta el hospital Camilo Muniagurria de Goya, que el menor había sido alcanzado por disparos que habían llegado de algún lado, mientras ellos se encontraban juntando paja para reconstruir el techo de su vivienda, en la Cuarta Sección “Paraje Rincón” de donde son oriundo.



Resultó que esta versión fue una mentira que el propio padre se encargó ayer de destruir, cuando confesó haber sido el autor del disparo que por poco le cuesta la vida a su propio hijo, mientras cazaban.



Según indicaron ayer fuentes policiales, en su declaración testimonial, Arce dijo que habían llegado hasta las cercanías del río Corrientes, pero no a juntar paja, sino a cazar y en un momento determinado, mientras manipulaba la escopeta calibre 16 que le había prestado un amigo, se le escapó un disparo que fue a dar en la humanidad de su hijo de 12 años, que se encontraba a pocos metros. Los perdigones impactaron en la pierna derecha y otro, por el que había más preocupación, en el estómago del niño.



Tampoco era cierto que la madre del menor estuvo con ellos en el momento en el que ocurrió el “accidente”. De hecho el padre habría llevado al chico hasta la casa y de allí hasta el hospital junto a la mujer. Al parecer, tras disparar a su hijo, Arce dejó la escopeta en su casa y posteriormente le devolvió el arma a su amigo.

 

En libertad



Ayer tras prestar declaración testimonial, Arce quedó en libertad por orden del Juez de instrucción de Goya, quien caratuló el caso solo como “lesiones graves”. Al parecer no tomó en cuenta el agravante del vínculo, dado que fue el propio padre quien se encargó de llevar al niño hasta el hospital.



Ayer por la tarde, efectivos del PRIAR Goya continuaban con las diligencias en el marco de la investigación y según revelaron altas fuentes del caso, mañana citarían a declarar al amigo de Arce y dueño de la escopeta que prestó para cazar.



Con las declaraciones del padre del niño y otros testimonios recogidos por la Policía, las pesquisas intentan establecer, si la versión que brindó Arce en su declaración tiene sustento o no, teniendo en cuenta que ya mintió una vez sobre lo sucedido con su hijo.



“Para la Policía no se descartará ninguna hipótesis, porque tampoco está bien firme lo del presunto accidente. Hay varios testimonios que se deben tener en cuenta antes de elaborar una carátula real en el caso. Por lo pronto el acusado no tiene prontuario, ni denuncia de violencia en su contra“, explicó un vocero de la fuerza.



En tanto, ayer también se conoció que el niño evolucionaba favorablemente. De su cuerpo se extrajeron los dos perdigones que le produjeron las heridas en el estómago y en la pierna, y continuaba internado en el hospital zonal de Goya.