El gobierno de Francia, conducido por Emmanuel Macron, rechazó la utilización de lenguaje inclusivo en la educación nacional. El Ministerio de Educación publicó un circular donde asegura que constituye un obstáculo al aprendizaje de los alumnos y no debe ser usado como alternativa.


Según el ministro de educación, Jean-Michel Blanquer, el lenguaje inclusivo modifica las reglas de concordancia. Además, afecta a la lectura en voz alta y a la pronunciación ya que no se puede realizar una transcripción oral.

Por otro lado, desde el Ministerio aseguró que con su inclusión se podría perjudicar a los niños con ciertas discapacidades. También se verían afectados los que tiene problemas para incorporar conocimientos.

Más allá de estas apreciaciones, aseguró que se debería impulsar la feminización de ciertos términos. Es especial los que se refieren a cargos.

Grupos feministas en Francia denuncian que el lenguaje actual invisibilidad a las mujeres. Sin embargo, desde el Ministerio de Educación manifestaron que este aspecto es perjudicial para la práctica y la inteligibilidad de la lengua.