Corea del Sur exhibió este jueves su capacidad militar al conmemorar el Día de las Fuerzas Armadas en un acto que subraya el progresivo endurecimiento del discurso de Seúl frente a Pyongyang ante la escalada de tensión entre el gobierno comunista de Kim Jong-un y su aliado estadounidense.
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, instó a fortalecer las capacidades defensivas del país y advirtió que responderá con un "duro castigo" a las "provocaciones" de Pyongyang, aunque sostuvo que su gobierno está haciendo todos los esfuerzos para evitar un choque bélico y que su objetivo es preservar la paz.
"La determinación de nuestro gobierno para proteger la paz requiere de unas capacidades defensivas fuertes. Responderemos a las provocaciones temerarias con un duro castigo", dijo Moon en una ceremonia para conmemorar hoy los 69 años de las Fuerzas Armadas, que se cumplen el domingo.