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Cambios: Carolina y Perugorría reciben a su nuevo párroco

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El padre Rubén Luis Cattay asumirá la conducción pastoral de la Iglesia de San Antonio de Padua de Carolina y San Pedro de Perugorria. La celebración eucarística de toma de posesión del nuevo párroco será presidida por el obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecin, y concelebrada por el obispo emérito, monseñor Ricardo Oscar Faifer, y otros sacerdotes religiosos y diocesanos, el sábado 23 de febrero a las 20,30. En Perugorria será el domingo a las 9.

 

El Padre Rubén Luis Cattay, es oriundo de Paraje Paranacito, nació el 3 de mayo de 1.955, en colonia Isabel Victoria vivió su  juventud,  cursó sus estudios teológicos y filosóficos en el Seminario Mayor "Santo Cura de Ars" (fundado por el Obispo Alberto Devoto) que funcionaba en esta ciudad de Goya. Fue ordenado sacerdote el 13 de junio de 1986 , y se desempeñó desde 1.986 como vicario parroquial de la Parroquia "Santa Rita" de la ciudad de Esquina durante tres años, después fue cura vicario de la Iglesia Catedral "Nuestra Señora del Rosario" de Goya y trabajó en las capillas de San Antonio del Barrio Juan XXIII, Inmaculada y La Merced.

 

También estuvo a cargo durante cuatro años del Pre Seminario "San Carlos Borromeo" de Goya.

 

Fue párroco en "Santa Catalina" de Esquina durante ocho años. En Mocoretá, en el departamento de Monte Caseros en la Parroquia "Nuestra Señora de Itatí" durante ocho años y en su lugar de nacimiento párroco de "San Antonio de Padua" de Colonia Carolina. Luego fue designado en Santa Catalina de Esquina y ahora regresa a su parroquia natal. Sucede en la tarea pastoral al padre Jose Antonio Castillo.

 

El lema que identifica a este caracterizado sacerdote correntíno es la frase bíblica extraída de Jeremias 1. 7-8 que expresa: "Iras donde te envié, y dirá lo que yo te mande. No tengas miedo, porque estaré contigo".

 

El Padre Rubén Cattay, tiene 64 años y  destaca: "en el día de mi ordenación sacerdotal, me puse bajo la protección de San Antonio, y de la Inmaculada Concepción de María y de la Virgen del Carmen, donde nací y me crie. Vivo feliz y con gozo mi ministerio sacerdotal, con el reconocimiento de mis hermanos sacerdotes y el Pueblo de Dios".

 

El Padre Rubén Cattay, dejo ayer la parroquia Santa Catalina de Esquina y, le toca hacerse cargo nuevamente de la Parroquia de Colonia Carolina en Goya.

 

“Tranquilo, reflexivo, dueño de una gran capacidad intelectual Rubén, no inclino la balanza a favor de ningún sector sino a favor de la Iglesia, logrando conducir en un buen clima los destinos de la institución” destaca una emotiva despedida en las redes sociales.

 

Abrió las puertas de la parroquia a todos, sin cerrarla a los sectores más débiles sociales, pero sin permitir la dominación por los sectores conservadores. La comunidad recibió estos cambios en forma alegre. Sus homilías y sus acciones han sido convocatorias permanentes a la paz social.

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