En la localidad del Norte unas 38 personas continúan en las cabañas del balneario. La Comuna extendió asistencia a parajes aislados. Controlaron el estado de salud de grupos sanroqueños y el río siguió bajando.

 

Se mantuvo la lenta mejoría de las condiciones hídricas en Caá Catí, una de las zonas más damnificadas tras las lluvias de la semana pasada, que produjeron inundaciones en el casco urbano y en donde aún hay parajes aislados. Mientras que en el caso de San Roque, el río Santa Lucía desciende, pero por la intensa humedad no están dadas las condiciones para que 17 familias relocalizadas pueden retornar a sus hogares.



En este contexto, el jefe comunal de Caá Catí, Eduardo Dualibe, comentó a El Litoral que “el agua sigue escurriendo bastante rápido, en las últimas horas volvieron a sus casas seis personas, así que estamos con casi 38 en las cabañas del balneario”. Adujo que estos vecinos “no pueden retornar porque no están dadas las condiciones, hay mucha agua o humedad alrededor de sus viviendas”.



En cuanto a la asistencia a los damnificados, recordó que “continuamos asistiendo con recursos propios, más lo que recibimos días anteriores de parte de diferentes organismos y personas solidarias”.



Sobre la situación de los pequeños productores, refirió que “retomamos la entrega de forrajes”, y ratificó que “los primeros días de la semana que viene está el compromiso de que lleguen insumos para entregar a aquellos que tienen animales pequeños como chivos, ovejas o chanchos”.



Con respecto a la zona rural, manifestó que “fuimos a Costa del Santa Lucía, pudimos llegar con el unimog del Ejército y se aprovechó para hacer un relevamiento. Se pudo comprobar que la gente no está demasiado crítica”. Seguidamente expresó que “se les abasteció con colchones, frazadas y mercaderías de la canasta básica, de primera necesidad”.



Contextualizó que “nos está faltando llegar a Cerrito y algunos parajes, pero ya tenemos cubierta casi toda la zona rural”.

 

Descenso sostenido



El río Santa Lucía siguió bajando en San Roque, lo cual genera alivio a las 17 familias que días atrás debieron autoevacuarse.



En tal sentido, desde Bomberos Voluntarios de la localidad comentaron a El Litoral que “el río está registrando lo que se conoce como marca oleaje, en 3,58 metros, y en condiciones normales debería estar en 3,55”. Además explicaron que “estuvimos observando el estado de algunas casas ribereñas del barrio Costanera y se advierte que el agua ya bajó un metro”.



Por otra parte, dijeron que “se mantuvo la cantidad de 17 familias que se relocalizaron en casas de familiares”.



En tanto el jueves “asistentes sociales de la Provincia junto con personal del Municipio, realizaron relevamientos y comprobaron que la gente, sobre todo los menores están bien, no hay patologías graves, que suelen ocurrir en estos casos”.