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La historia el niño correntino que esperó once años para cumplir su sueño y es furor en Racing

En la fecha 8 pudo cumplir el deseo de su vida: ver a la Academia de local. Apareció en el programa Paso a Paso y su frase lo lanzó a la fama. Este viernes lo recibe el plantel.


Setecientos noventa y cinco kilómetros separan a Antonio del estadio Presidente Perón. Pasaron 11 años para que se cumpla uno de los mayores deseos de su vida: conocer la cancha de Racing. Ir a la tribuna. Rodearse de gente que tiene su misma pasión, cantar sus canciones favoritas y ver a su equipo. Y lo cumplió: "Vine de Corriente para ver a la Gagoneta como no le para nadie", se coló el chico en una cámara de televisión. Y su grito quedó patentado entre los hinchas académicos.


Del interior de Corrientes, de un pueblo llamado Santa Lucía, Antonio viajó por primera vez en su vida para ver al club de sus amores: Racing. Fue una tarde soñada. El equipo de Fernando Gago se floreó en la goleada a Sarmiento de Junín por 4-1. Vio goles, a Lisandro López, aprendió las canciones, estuvo junto a sus padres y su hermanito en la tribuna y le sucedió algo inesperado que dio un giro rotundo de su vida: se volvió famoso en el mundo académico.


Todo arrancó en la previa del partido, en las inmediaciones del estadio, cuando Antonio esperaba para ingresar a la cancha hasta que se acercaron las cámaras del programa Paso a Paso. Si bien el equipo de TyC Sports estaba haciendo otros reportajes buscando color en las afueras del estadio, con su frescura el pibe de corrientes se robó todo el protagonismo. "Yo me metí a hablar solo. Nadie se acercó a mí, yo me acerqué a ellos y gracias a mi mamá que me dijo que diga que soy de Corrientes y que vine solo para ir a la cancha. Ahí se me ocurrió decir esa partecita que ahora usan todos. Todo esto lo causó un video de 3 segundos, eso es lo increíble", expresó el niño fanático de la Academia.


Antonio habló con Clarín ​mientras prepara el viaje que realizará este viernes a la provincia de Buenos Aires, esta vez, para asistir al entrenamiento de Racing y conocer a los jugadores.


-¿Cómo te hiciste hincha de Racing?


-Casi toda la familia de parte de mi papá era de Racing. Mi abuelo, mi papá, mi tío, mi tía, mis bisabuelos y desde ahí surgió que todos seamos hinchas. Entonces ahí empecé a serlo y todos me decían "¿Cómo vas a ser de Racing? No vas a ser feliz nunca en tu vida" y yo no les hacía caso, les decía que se callen, no me importaba.


Antonio en el estadio de Racing contra Sarmiento de Junín.


-Toda tu vida Racing fue un amor a lo lejos…


-Si, siempre fue un amor lejano. Mi abuelo siempre me decía que él veía por el diario las noticias y lo que pasaba en el club, que tardaba en ver cuando ganaba Racing y como le iba. Y ahora… mira con la facilidad que vemos los partidos.


-¿De qué manera llegó la oportunidad de ir por primera vez el estadio?


-Yo le venía diciendo a mi papá: "Pa, dale, vamos", y él me decía que pare, que algún día nos iba a tocar viajar. Y ahora esto es un milagro para mí.​ De no ir nunca a ir dos veces en un mes, es un montón.


-¿Te gustó Avellaneda?


Sí. Yo ya me quiero ir a vivir ahí para estudiar algo que tenga que ver con el deporte, todavía no sé qué pero quiero que sea ahí. Me gustó pero es muy distinto a Corrientes más que nada en el tránsito, las calles y obviamente la cancha.


Antonio y su pasión desde el día que nació


-Y ya que conociste la de Racing, también viste el estadio de Independiente…
-Sí y es horrible. No la quería ni ver.


-¿El fin de semana que planes tenes?


-El jueves a la noche nos vamos a Buenos Aires en colectivo y el viernes a la mañana vamos a ir al entrenamiento de Racing. Nos quedamos allá y el domingo vamos a la cancha a ver el partido contra Newell’s.


-¿Cómo se contactaron de Racing?


-A mamá le contactaron. Yo no sabía nada. Todos sabían menos yo. Ella le dijo al grupo de mi escuela que no digan nada por si no se cumple. La filial de Corrientes fue la que primero se contactó y dijo que había probabilidades, que estaba casi todo hablado. Pero nosotros vamos por nuestra parte. Decidimos viajar en micro porque tardamos menos que en vehículo. Hacemos todo de nuestra parte y después, una vez que estemos allá, Racing nos invita al entrenamiento.


Antonio junto a su papá y su hermanito en el estadio de Racing por primera vez.


-¿Los viste a los jugadores hablando de vos en la tele y diciendo que te esperan el viernes?


-Sí y no podía creer cuando Carlos Alcaraz, Enzo Copetti y Aníbal Moreno me nombraron en la entrevista y dijeron que me esperaban en un entrenamiento que me iban a dar alguna camiseta o algo. Yo no lo podía creer, es un sueño y una fortuna.


-¿Los partidos cómo y en dónde los ves?


-Desde mi casa. Veo todos y no me pierdo ninguno. Si estoy en otro lado, lo veo por mi teléfono a ver cómo va. En el partido contra Independiente yo estaba en una carrera de autos de karting y no me quería ir, entonces a cada rato estaba mirando el partido por el celular. Cuando Copetti metió el gol lo grité un montón y me pedían que haga silencio porque estaban todos callados… No importa lo que pase, yo siempre sigo a Racing en donde sea.


Antonio junto a su familia en la pieza donde se miran los clásicos.


-¿Tenés una cábala?


-Siempre la misma camiseta y la bandera colgada.


-¿Cuántas cosas tenés de Racing?


-Tengo la carpeta de la escuela, los separadores, una bandera, una corbata, tres camisetas, una gorra y una bufanda. Pero acá no se consigue nada en ningún lado, todo lo de Racing lo compramos por internet porque acá no venden. Para mi cumpleaños hice todo de Racing y justo mi abuela había ido a Buenos Aires un mes antes y ya me trajo la vela de allá porque acá de eso no hay.


Todas las camisetas de Racing que hay en la casa de Antonio


-¿Cuál es tu jugador favorito de Racing?


–Diego Milito y Licha. Pero hoy en día todos están jugando bien. El equipo está unido y todos juegan bien. Racing es uno de los mejores equipos.


-¿Y la canción que más te gusta?


Me la paso cantando "Y dale alegría alegría a mi corazón…" y ahora hasta mi mamá, que no es fanática de Racing como nosotros, también la canta. También me gusta "Muchachos…", y la canción que dice "cuando se fue al descenso le hicimos el funeral", por Independiente.


-Quizás con todo esto ahora algún amigo o familiar que no es de Racing, se haga hincha por vos…


-Mi primo es hincha de Boca y nosotros en el 2019 cuando Racing salió campeón salimos en caravana y el grabó un video donde hacía de cuenta que no veía a nadie de Racing, pero había mucha gente. Hicimos dos cuadras de caravana festejando en el pueblo. Ese día vimos el partido toda la familia en la pieza de mis papás y cuando empató Tigre nos agarró muchos nervios pero con el empate de Defensa y Justicia salimos campeones y salimos de caravana.


Antonio junto a su familia en la caravana de Racing campeón 2019


A la par, la mamá de Antonio, Aisha Alonso, comentó cómo hacen para mantener esta época popular que está teniendo el joven de 11 años y de qué manera se enteraron. "El miércoles de la semana pasada nos enteramos por un diario de acá que se había vuelto viral, porque él no tiene redes sociales. Y ahora me encontraron a mí entonces sí me etiquetan y puedo ver todo lo que comparten.


-¿Cada cuánto podrían viajar hacia Buenos Aires?


-El día que veníamos Antonio decía que ya había que planificar que otro partido íbamos a ir. Ya estaba ansioso con volver y estar presente en la Copa Sudamericana, pero nosotros le decíamos que tenía que esperar porque no podemos viajar tan seguido para Buenos Aires.


-¿Cómo vivieron su primera vez dentro de un estadio y vivir en Buenos Aires por unos días?


-Ese día que fuimos a la cancha para nosotros fue toda una ocasión porque sacamos un turno para venir al oculista asi que teníamos esa fecha si o sí para ir a Buenos Aires. Mi primo, que se vino a estudiar a Buenos Aires para estar cerca del estadio, me decía que tenía que traerlo si o sí contra Sarmiento porque iba a estar Licha. Así que esperábamos que suceda todo ese día. Fuimos en subte, en tren, hicimos toda la movida previa para llegar. Cuando salimos del hotel, con las camisetas y todos vestidos de Racing, un hombre nos dijo que no podía ir a la cancha y nos hablaba como si fuéramos conocidos de toda la vida. La gente pasaba y gritaba "¡Vamos Racing!" como si nos conociéramos. Yo no lo podía creer. Parecían todos íntimos. Es algo muy loco y muy lindo. Cada vez que un hincha de Racing ve a otro con la camiseta, ya piensan que son íntimos porque se saludan, se dan la mano.


-¿Cómo lo sintieron?


–Para los que viven allá es algo normal, pero para nosotros es algo histórico. Veía a las familias y a nosotros, que Antonio haya ido con su papá, su hermanito, hacer todo el plan para sacar la entrada y para todo, es una experiencia inolvidable. Ojalá lo podamos llevar más seguido porque son recuerdos para toda la vida, son reliquias. Ver a los abuelos con los nietos, los padres con los hijos, es algo increíble. Nosotros valoramos todo, desde ir a comer antes de la cancha hasta después, ver a toda la gente con la vestimenta del club, es todo un mundo de celeste y blanco.

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