La quinta temporada reproductiva del guacamayo rojo en Iberá acaba de dar un gran paso: Atahualpa, Pampa, Toba y Charrúa volaron del nido.
Esto consolida el desarrollo de los pichones, quienes estuvieron tres meses creciendo en su caja-nido, bajo el cuidado de sus padres y con algo de ayuda de nuestro equipo de monitoreadores en el norte de Iberá.
Cabe destacar, el guacamayo rojo está volviendo a Corrientes luego de 100 años de extinción en toda la Argentina. Ahora, cuatro nuevos dispersores de frutos y semillas se encuentran surcando el cielo, y son nacidos y criados en el gran humedal correntino.